Si hablamos de 2012, el total de unidades vendidas a mes de octubre, era de 11.538.000 teléfonos. De ese total, sí hay que destacar que casi ocho millones y medio (8.5 MM) son smartphones y que casi el 50% (47,6) de la cuota de mercado de teléfonos inteligentes pertenece a Samsung, seguida de Sony (14%) y de Blackberry (8%), ambos a gran distancia del líder. Para los incrédulos reseñar que Apple queda relegado a la cuarta posición con LG pisándole los talones quien absorbe una gran parte de las ventas de BlackBerry y HTC en la comparativa mensual de 2012, con un gran crecimiento registrado en los últimos meses.
Así, habría que hablar de una caída del mercado del 36%; pero si miramos dos años atrás, los porcentajes pueden superar el 40% en sentido negativo siempre hablando en unidades, no en valor.
Indudablemente, una de las razones que explican la situación es la crisis económica general que azota al país, pero no es menos cierto
que los datos de los operadores también invitan a pensar que su política de subvenciones ha afectado más de lo que ellos mismos suponían cuando, a primeros de año, anunciaban cambios en su estrategia de subvenciones.
Muy paradójico resulta el hecho de que los resultados, son inversamente proporcionales a los avances que se han realizado en tecnología y que podrían conllevar un drástico parón en la innovación, la implementación de tecnologías como NFC o lo que es peor, la llegada de la cuarta generación y de las redes LTE.
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