Realmente 2012 ha sido un año extraño. doce largos meses en los que, paradójicamente y a simple vista podría parecer que nada ha ocurrido y que hemos terminado como empezamos: hablando de la política de subvenciones de los operadores, de terminales y redes LTE que imaginamos más que disfrutamos, de la llegada e implantación de Windows 8, o de los servicios RCS-e (Joyn).
Sin embargo, en 2012 ha habido mucha magia: descubrimos que una cámara de altas prestaciones puede ser también teléfono, que una imagen estática puede tener movimiento, que los ordenadores son flexibles y adoptan mil y una postura, que si le preguntamos cosas a nuestros móviles nos
contestan con naturalidad, que tenemos teles muy listas, que podemos ‘tuitear’ desde la nevera o incluso que podemos llamar a nuestra lavadora y pedirle que tenga la amabilidad de ponerse a trabajar.
Vivimos en un mundo de fantasía sin haber atravesado un espejo. Cada uno de los ciudadanos del mundo somos Alicias potenciales con capacidad de soñar y compartir nuestros sueños, crear y difundir nuestras creaciones, pensar y vocear nuestros pensamientos, buscar y encontrar, ver y sentir, tocar y descubrir, gracias a las TIC.
No sé si somos pocos o muchos los que lo hemos entendido, asumido, experimentado y enseñado; pero si formamos parte de la vanguardia tecnológica, me gustaría pensar que es para abrir camino a millones de personas que deben poblar tierras ya conquistadas a las que nosotros, pioneros, debemos iluminar el camino.
¿Y cómo lo podemos hacer? de la única que forma que sabemos: escribiendo. Así es que gracias por leernos, por seguirnos, por tantos ‘me gusta’, por ser fans, por tiempos de lectura de hasta 22 minutos, por la media de 15 páginas vistas, por comentar, por apoyarnos, por animarnos… por ayudarnos a iluminar ese camino, por cada candil que ponemos.
Feliz Navidad y un muy próspero y tecnológico 2013
Si (
No(
