KKR se hará así con el 54% de la entidad, mientras que Entel se quedará con el 10%, por su parte, Telefónica Hispam conservará el 36% restante. En este sentido, tanto Telefónica del Perú como Entel venderán a Pangea ciertos activos de su infraestructura de fibra óptica hasta el hogar (FTTH) y se cierran una serie de contratos de prestación de servicios mayoristas de conectividad, tanto con Telefónica como con Entel.
La operación, cuyos términos económicos no se han desvelado, está ahora en manos de los reguladores que deberán aprobarla. Sí se sabe que la transacción representa para Telefónica un múltiplo sobre OIBDA proforma de aproximadamente 20 veces y que al cierre de la transacción, la deuda financiera neta del Grupo Telefónica en unos 200 millones de euros. Además, se han acordado diversos pagos variables en los próximos cuatro años después del cierre de la venta.
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El cierre de la venta del control de esta filial llega apenas dos semanas después de un gran cambio en la cúpula directiva de Telefónica del Perú con el nombramiento de Elena Maestre como nueva presidenta de la entidad, en sustitución de Pedro Cortés, debido a un fuerte litigio fiscal con la hacienda del país andino con una multa que ronda los 800 millones de euros y que se suman a las malas cifras del negocio financiero en la región con la pérdida de 1.455 millones de soles (unos 356 millones de euros) durante el ejercicio del año 2022, debido al impacto de esta multa.
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