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Ricardo Olalla, vicepresidente de ventas de Bosch Mobility para España y Portugal, analiza los desafíos de la movilidad en España
Ricardo Olalla, vicepresidente de ventas de Bosch Mobility para España y Portugal, analiza los desafíos de la movilidad en España

Desafíos de una movilidad que trasciende la tecnología

Por Firma invitada
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infozonamovilidades/4/4/18
domingo 25 de febrero de 2024, 08:00h

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El principal desafío que plantea la movilidad lo encontramos en la neutralidad de carbono, un compromiso ineludible que adquiere una dimensión global. Es tarea de todos los países y territorios estar coordinados para avanzar en la consecución de este objetivo común, precisamente para una industria clave en la economía.

En el caso de España, conviene tener en cuenta que el sector de la logística y el transporte representa el 6,9% del PIB español, según señala el ICEX. Una cifra que llega a alcanzar el 10% si añadimos la actividad logística de empresas industriales, comerciales y de servicios. A todo esto, hay que sumar la cifra de negocio anual de la industria, que llega a los 101.000 millones de euros y que genera casi un millón de puestos de trabajo.

Por lo tanto, en el escenario global actual, donde el transporte es uno de los grandes protagonistas, todos nuestros esfuerzos dentro de la industria deben ir orientados hacia una misma dirección: conseguir una movilidad sostenible y sin emisiones. A su vez, recordemos que esta es, sin duda, una de las cuestiones fundamentales de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, en la que estamos trabajando intensamente. No obstante, aún queda un largo camino por recorrer y debería seguir los siguientes puntos:

Posicionar la experiencia del usuario como prioridad

Se espera que, hasta el año 2030, el mercado de software para automóviles supere con creces los 200.000 millones de euros, es decir, se triplicará con respecto a 2020. Los vehículos definidos por software mejorarán significativamente la experiencia del usuario, generando a la vez nuevas cadenas de valor, mientras que la conducción automatizada y los nuevos conceptos de movilidad también desempeñarán un papel crucial. En este contexto, las compañías del sector debemos enfocarnos en dar forma a una nueva era tecnológica de la movilidad.

Avanzar hacia una economía basada en el hidrógeno

El motor de hidrógeno es otro de los grandes protagonistas. Además de ser totalmente neutro en carbono, es especialmente apropiado para los vehículos pesados y se basa un 90 por ciento en tecnologías ya existentes. Hay que tener en cuenta que los nuevos sistemas de propulsión requieren nuevas infraestructuras y la voluntad política necesaria. Especialmente en Europa, tenemos que avanzar con mucha más rapidez y determinación, sobre todo en el establecimiento de una economía basada en el hidrógeno. En Bosch estamos firmemente convencidos de que un mundo climáticamente neutro sólo puede existir con hidrógeno.

Abordar la movilidad desde un enfoque basado en la diversidad

Debemos mirar hacia la transformación de la movilidad en general, en vez de centrarnos en una tecnología concreta. Todos estamos de acuerdo en que los sistemas de propulsión del mañana serán neutros desde el punto de vista climático. Sin embargo, no serán iguales en todos los ámbitos. Corresponde sobre todo a las empresas que operan a escala mundial comprender la diversidad de las distintas soluciones de movilidad y responder plenamente a las necesidades de todas sus aplicaciones. Esto significa que se requiere una solución adaptada para cada aplicación y para cada región. No podemos imponer las mismas tecnologías en diferentes regiones, ignorando sus necesidades y grado de desarrollo. En China, por ejemplo, la electromovilidad está experimentando un crecimiento significativo, a la par que observamos un avance importante en la pila de combustible.

"Estas inversiones no sólo aportarán recompensas económicas, sino que también resultarán muy beneficiosas para nosotros como ciudadanos que vivimos en una sociedad orientada al progreso"

Estamos ante un periodo de cambios que supondrá un gran desafío y requerirá tiempo y recursos. Sin embargo, al final, estas inversiones no sólo aportarán recompensas económicas, sino que también resultarán muy beneficiosas para nosotros como ciudadanos que vivimos en una sociedad orientada al progreso. Nunca antes se había evidenciado tanto el propósito de nuestra industria: estamos creando una nueva movilidad y, con ello, salvaguardando nuestra futura libertad y prosperidad. Nuestra industria se encuentra en la cúspide de una nueva era. Pero este compromiso exigirá un enorme esfuerzo por parte de todos los agentes del sector. Sabemos que a cada nuevo reto le seguirá otro, pero como sólo podemos conservar nuestra libertad individual garantizando una movilidad sostenible, estoy plenamente convencido de que estos esfuerzos merecerán la pena.

Autor: Ricardo Olalla, vicepresidente de ventas de Bosch Mobility para España y Portugal

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