SES completa la compra de Intelsat por 3.000 millones

SES ha consolidado su posición en el sector de la conectividad satelital tras finalizar la adquisición de Intelsat por un valor de 3.1 mil millones de dólares. Este movimiento estratégico ha dado lugar a una empresa ampliada que opera con una red compuesta por aproximadamente 90 satélites geostacionarios (GEO) y cerca de 30 satélites en órbita terrestre media (MEO), además de contar con una extensa red terrestre y acceso estratégico a capacidades en órbita baja (LEO).

La compañía ha destacado que esta fusión le permite ofrecer servicios a través de diversas bandas de espectro, lo que la coloca en una “fuerte posición competitiva” para satisfacer las necesidades cambiantes de sus clientes, que incluyen gobiernos, sectores de aviación, marítimo y medios de comunicación a nivel global.

Nuevas oportunidades y sinergias

SES opera en el competitivo segmento de las comunicaciones satelitales, donde se enfrenta a grandes rivales como Eutelsat y Starlink de SpaceX. La adquisición fue anunciada en abril de 2024 y recibió la aprobación regulatoria necesaria tanto en la Unión Europea como en Estados Unidos.

El CEO de SES, Adel Al-Saleh, afirmó que la finalización del acuerdo representa la creación de “una empresa más fuerte, construida para el futuro”. Esta integración no solo une un talentoso equipo humano y una infraestructura robusta, sino también innovaciones y relaciones globales que permitirán ofrecer conectividad y servicios espaciales avanzados de manera más eficiente.

Beneficios operativos esperados

SES anticipa obtener sinergias operativas por un valor aproximado de 2.4 mil millones de euros, con alrededor del 70% esperado en los primeros tres años. Estas economías se lograrán mediante operaciones simplificadas, optimización de costos y mejoras en las adquisiciones. Además, se prevé una integración estratégica entre las flotas satelitales y la infraestructura terrestre.

Con sede en Luxemburgo, SES planea mantener una “presencia significativa” en Estados Unidos, donde Intelsat tenía su sede principal. Este enfoque refuerza su compromiso con el mercado estadounidense mientras busca expandir sus capacidades globalmente.