Llega lo previsible. Después de la publicación de los datos de miles de usuarios de Ashley Madison empiezan a aflorar las consecuencias. Según publicaba The Telegraph, en Reino Unido ya se han comenzado a oficializar los primeros divorcios de parejas afectadas por la filtración.
El abogado Nigel Sheperd ha revelado que una mujer casada ha contactado con ellos después de descubrir el nombre y detalles de su marido entre las millones de cuentas publicadas. Otro abogado, Chris Longbottom, declaraba al medio inglés que reciben unas tres llamadas diarias para pedir divorcio después de que los hackers sacarán los datos a Internet. El letrado reconoce que a medida que pase el tiempo se espera que surjan más casos.
Pero los problemas no sólo atañen a los usuarios. La firma Ashley Madison se puede enfrentar a demandas masivas. En primer lugar, porque en sus cláusulas decían que los datos no se quedaban en sus servidores, demostrándose ahora que sí, y en segundo lugar, porque se ha demostrado (ver imagen debajo donde el color roja muestra que hay un 85% o más de hombres inscritos) que el ratio de hombres y mujeres era muy equidistante y estaba manipulado por la propia plataforma, hecho por el que han sido hackeados.
The Telegraph ha estimado que dando una compensación económica a sus usuarios de 1.000 libras, sólo en Reino Unido (1,2 millones de suscriptores) la cantidad que tendría que dar AM sería de 1.200 millones de libras...sería la quiebra total de la empresa.
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