Gran Bretaña ha inaugurado hoy el proceso para la subasta de espectro para la repartición de 190 MHz entre los operadores con el fin de encontrar el camino adecuado hacia el 5G.
En concreto, Ofcom subastará 40 MHz de espectro en la banda de los 2,3GHz, que ya utilizan dispositivos móviles de fabricantes como Apple y Samsung. Además, destaca que estas ondas podrán utilizarse inmediatamente tras ser liberadas para dar capacidad extra, lo que implica descargas y navegación por Internet más rápidas para los usuarios móviles.
Asimismo, se subastarán 150 MHz en la banda de 3,4GHz, que no es compatible con la mayoría de los dispositivos actuales, pero que se espera sea utilizada en un futuro por smartphones y tablets. De hecho, el regulador incide en que esta banda ha sido identificada como "clave" para el despliegue del 5G en Europa. Por otra parte, las únicas noticias de la salida a subasta de la frecuencia 700MHz, que tantas expectativas ha levantado durante los últimos tiempos, son acerca de su liberalización para principios de la próxima década. Por tanto, las cadenas de televisión y micrófonos inalámbricos siguen teniendo lugar de residencia hasta, al menos, 2020.
Una de las partes fundamentales de la decisión regulatoria ha sido la incorporación de un umbral máximo de 37% del espectro, que dejará fuera a compañías como BT
Limitaciones a favor de los pequeños operadores
Una de las partes fundamentales de la decisión regulatoria ha sido la incorporación de un umbral máximo de 37% del espectro. Con esta medida, operadores como BT tendrán que quedarse fuera de cualquier puerta de la subasta, ya que cuenta con un 45% del espectro actual. En el caso de Vodafone, sólo podrá acceder a un máximo de 160 MHz, al contar ya con un 28% de ese espectro.
Por su lado, Telefónica se frota las manos ante, posiblemente, la mayor inversión a la que tendrá que hacer frente durante este año y su mejor oportunidad para ascender cuantiosamente en términos de competitividad dentro del país británico.
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