La fábrica, que estará en Crolles, al sureste de Francia, será la segunda en suelo europeo y supone un avance en la estrategia europea para reducir la dependencia de Asia y Estados Unidos en producción de semiconductores.
La planta estará finalizada en 2026 y dará trabajo a unas 1.000 personas con una inversión de 5.700 millones de euros, además de recibir fondos públicos del gobierno francés como parte de los fondos europeos, una cuantía pequeña en comparación con los 17.000 millones que invertirá Intel en Alemania.
La planta no se centrará en chips de primer nivel, sino que se destinará a semiconductores de 18 nanómetros para automoción, IoT y otras aplicaciones lo que permitirá dar respuesta a un amplio espectro de la industria con el objetivo de fabricar unos 300 millones de obleas al año.
La fábrica que acogerá Francia permitiría a la compañía franco-italiana STMicroelectronics ampliar sus capacidades de fabricación y reforzar su posición en la industria y la compartirá con GlobalFoundries, un fabricante estadounidense que produce chips para AMD, Broadcom y Qualcomm, entre otros.
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Europa y España buscan su fábrica
A pesar de la buena noticia para Europa, el objetivo de Bruselas se esperaba que atrajese fabricantes de chips modernos (de 2 o 3 nanómetros), pero la escasez de jugadores en este nivel es muy reducida por lo que la UE está teniendo problemas para atraer empresas. En los últimos meses se ha confirmado la construcción de una planta de TSMC en Arizona (EEUU) con una inversión de 12.000 millones; una fábrica de Samsung en Texas (EEUU) con una inversión de 17.000 millones; y una fábrica de Intel en Alemania por otros 17.000 millones de dólares.
En la batalla también se encuentra España que ha aprobado un PERTE de semiconductores con un presupuesto de 12.250 millones de euros, con el fin de favorecer la creación de fabless (empresas que diseñan chips), escalar startups del sector y, principalmente, incentivar la instalación de una fábrica de, al menos, 5 nanómetros con una cuantía de 9.350 millones de euros.
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