La estrategia, anunciada durante el Ericsson Capital Markets Day 2022 que se ha celebrado hoy, siente las bases para dar la vuelta al segmento con el fin de alcanzar el punto de equilibrio en 2023 a nivel de EBIT/EBITA con mejoras graduales hacia una rentabilidad atractiva a largo plazo.
Según ha explicado Ericsson, tras revisar la cartera de productos y de clientes, la firma sueca abandonará ciertos acuerdos de subescala y ofertas de productos, lo que tendrá un impacto negativo puntual en el EBIT de 800 millones de coronas suecas (unos 72 millones de euros) en el cuarto trimestres del año, de los cuales 700 millones (63 millones de euros) se espera que afecten al flujo de caja en 2023.
Ericsson prevé caídas en varios mercados, pero confía en la 5G
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Ericsson apunta a un crecimiento del 11% anual del mercado RAN 5G
Asimismo, en el negocio de redes, Ericsson espera ampliar su huella global y mejorar los ingresos brutos a través de inversiones continuas en tecnología para el rendimiento y el liderazgo en costes y mejorar la productividad y la eficiencia del capital en toda la cadena de suministro.
En concreto, seguirán invirtiendo en mejorar el rendimiento energético de la cartera, habilitado por Ericsson Silicon e innovando la arquitectura abierta de próxima generación, como Cloud RAN, que también ofrece potencial en el segmento empresarial.
En este sentido, se espera que el mercado global de RAN sea plano, con un crecimiento del 11% anual en el mercado de RAN 5G durante los próximos tres años. Ante esta situación, Ericsson está estructurando su base de costes y operaciones con el fin de aumentar su cuota de mercado RAN fuera de China en un 1% anual y aumentar el beneficio bruto.
Foto: Depositphotos
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