El Consejero delegado de Vodafone España empezó el día repasando unas cifras preocupantes que constatan que en los últimos cinco años los ingresos del sector descendieron 7.425 MM y el mercado móvil 5.000 MM. Además, mientras las empresas que invierten en infraestructura registran fuertes caídas, con pérdidas del 30%, los ingresos de los operadores móviles virtuales subieron un 300%. Así, mientras el Ebitda ha descendido 4.232 MM de euros, el CAPEX de los operadores (Movistar, Vodafone, Orange, ONO y Jazztel) se ha mantenido; ya que el mercado funciona y crece el uso de servicios que demandan fuertes inversiones.
En este contexto Coimbra consideró que “es imprescindible generar condiciones que alienten el crecimiento y el desarrollo de la economía digital. Así, la regulación debe pasar de la obsesión por el número de competidores, cuanto más mejor, al impulso de una economía digital que promueve el crecimiento”.
Europa lo ha hecho mal
Tanto Coimbra como el presidente de Everis, el exministro Eduardo Serra, con palabras menos 'enérgicas' que las utilizadas por el presidente de Telefónica, Cesar Alierta, coincidieron en la máxima de que un sector de telecomunicaciones sano impulsa el crecimiento económico y la creación de empleo, pero al no haber afrontado correctamente la situación en Europa los efectos de la crisis se mantienen y no sólo la industria sectorial no ha vuelto al crecimiento, sino que no ha tenido, aún, el efecto eco revitalizador que tiene el mundo digital sobre la sociedad y la economía.
En su planteamiento, el ejecutivo portugués expuso los retos a superar en Europa: la industria fragmentada y la regulación centrada en los precios y en el número de competidores; pero, también, los retos adicionales y muy relevantes que tiene España como “el riesgos de abuso de posición dominante de Telefónica, ahora también en el campo de los contenidos audiovisuales. La destrucción de valor en telefonía móvil (obsesión por el número de competidores), la sobreimposición (tasa RTVE) o la desproporción de la cuota de mercado del incumbente en las administraciones públicas”.
Por eso, Coimbra reclama que “en telecomunicaciones fijas se garantice la inversión y la competencia, así como una oferta diversificada sobre redes de nueva generación, promoviendo la competencia en infraestructuras y una política de red compartida/abierta en zonas no competitivas”.
No a la tasa de RTVE
En el entorno móvil Vodafone considera que se debe eliminar la declaración de dominancia conjunta de los tres principales operadores del sector, disponibilidad del dividendo digital en 2014 y supresión de la tasa RTVE. Además, reclama condicionar la adquisición de DTS/Canal+ por Telefónica a la imposición de garantías para el funcionamiento competitivo de los mercados audiovisuales y de las telecomunicaciones porque “la exclusividad de contenidos junto con la convergencia puede llevar a un abuso d ella posición dominante, a través de un crecimiento de cuota vía mercado convergente”.
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