Según una información de Berg Insight, los envíos mundiales de sistemas telemáticos integrados crecerán de los 8,4 millones de 2013, hasta los 54,4 en 2020. Esto incluiría a 68 millones de coches con este tipo de tecnología, que permitiría mejorar en gran medida su seguridad, entre otras cosas.
Telemático es un término que podría usarse para distintos tipos de conexiones. En el caso de estos coches, se tratarían de un sistema automático que incorporaría cierta comunicación móvil (aunque los fabricantes de automóviles pueden elegir entre distintos tipos).
Los servicios conectados están comenzando a ganar terreno tras muchos años de desarrollo. Los conductores a favor de la integración de esta tecnología buscan, entre otras cosas, una conectividad que permita hacer llamadas de emergencia desde cualquier coche.
Otras mejoras que tendrían los coches gracias a este tipo de tecnología sería la de asistencia en carretera, localización de coche robado, diagnosis del vehículo, navegación conectada, etc. Una serie de mejoras que no es de extrañar, marquen el futuro de la conducción en unos años.
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