Android cambia su formato de publicación de aplicaciones

La comodidad es lo que principalmente ha ganado esta batalla entre formatos, dado que el peso de las aplicaciones, por lo general, no suele ser ligero y el nuevo formato AAB hace que pueda resultar más sencillo tener acceso a más aplicaciones, reduciendo su tamaño final. A pesar de todo, la experiencia será la misma para todo el mundo, salvo para los desarrolladores de aplicaciones nuevas, dado que este cambio hará que las apps ten gan que estar empaquetadas en este nuevo formato; mientras que los usuarios que se dediquen a crear copias ilegítimas de dichas aplicaciones, también se verán afectados, dado que gracias al formato AAB no será posible extraer copias completas de las aplicaciones, sino una copia limitada que probablemente no resulte funcional en la mayoría de dispositivos móviles.

Cambio de formato

Para saber a qué se debe la decisión de Android de modificar el formato final en el que se publican sus aplicaciones debemos comprender, en primer lugar, las diferencias que existen entre ambos para así saber qué es lo que ha llevado a la compañía a tomar dicha decisión. Según se conoce, dentro de una APK convencional podemos llegar a encontrar todos los recursos necesarios y disponibles para que funcione una aplicación, de esta forma, si instalamos una APK convencional, estamos recogiendo todos esos recursos de la aplicación, incluyendo también los que no necesitamos, como es el caso de los diferentes idiomas, lo que aumenta el peso final de la descarga. Por este mismo motivo, el hecho de buscar una alternativa a este problema, es un factor clave a la hora de elegir formatos de descarga de aplicaciones.

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Tras analizar esto, es cuando nos damos cuenta del valor añadido que AAB puede aportar a la tienda de aplicaciones de Android, dado que este nuevo formato es un contenedor con todos los recursos de la aplicación, pero resulta modular, lo que se traduce en la posibilidad de optar sólo por el uso exclusivo de algunos de esos recursos. Este nuevo formato, está basado en APK y en un inicio resulta similar, al igual que todos los recursos que se encuentran en su interior, pero son separados gracias a una segunda división llamada Split APK. Al descargar una aplicación con dichas características de formato, Google crea una APK independiente que solo incluye los recursos que necesita cada usuario. De esta forma, el cambio reside en quien publique la aplicación, dado que debe ofrecer este nuevo formato mientras que los usuarios seguirán descargando aplicaciones en formato APK pero personalizadas gracias a AAB.

El resultado

Existe un ligero cambio en lo que al cambio de formatos se refiere, siempre y cuando hablemos de los usuarios, y es el tamaño final de las aplicaciones que se descargan. En este caso, Google ha hablado de hasta un 15% de reducción de tamaño de media, y todo ello gracias a eliminar recursos de aplicaciones que el propio usuario no va a tener que usar. Sin embargo, los desarrolladores tendrán que lidiar con otra serie de inconvenientes como es el caso de las copias ilegítimas de las apps, dado que acceder a una APK no resulta complicado pero ahora dichas APKs ya no serán de utilidad dado que estarán adaptadas a cada usuario gracias a publicar las aplicaciones en formato AAB, eliminando casi por completo la posibilidad de piratear aplicaciones.