"El gasto en IT de las empresas es a prueba de recesión, ya que los directores generales y los directores financieros, en lugar de recortar los presupuestos de IT, están aumentando el gasto en iniciativas empresariales digitales", indicó John-David Lovelock, analista distinguido de Gartner. "Las turbulencias económicas cambiarán el contexto de las inversiones en tecnología, aumentando el gasto en algunas áreas y acelerando los descensos en otras, pero no se prevé que tengan un impacto material en el nivel general de gasto tecnológico de las empresas".
"Sin embargo, la inflación ha recortado el poder adquisitivo de los consumidores en casi todos los países del mundo. El poder adquisitivo de los consumidores se ha reducido hasta el punto de que muchos consumidores están aplazando las compras de dispositivos de 2022 hasta 2023, lo que hace que el gasto en dispositivos se reduzca un 8,4% en 2022 y un 0,6% en 2023", señaló Lovelock.
Las tecnologías que se mantienen frente a las que impulsan el negocio son evidentes por sus tasas de crecimiento previstas en 2023. Hay suficiente gasto dentro de los mercados de centros de datos para mantener los centros de datos existentes en las instalaciones, pero el nuevo gasto sigue desplazándose hacia las opciones en la nube, como lo demuestra el crecimiento del 11,3% proyectado para el gasto en software en 2023.
Las organizaciones siguen protegiendo las inversiones digitales impulsadas por la eficiencia
En una economía a la baja o en deterioro, la sabiduría convencional pide que se reduzcan los costes, incluidos los de IT. Sin embargo, una encuesta de Gartner realizada en julio de 2022 a más de 200 directores financieros descubrió que el 69% planea aumentar su gasto en tecnologías digitales, mientras que la encuesta de Gartner a los ejecutivos de tecnología y CIO de 2023 descubrió que los CIO tienen la tarea de acelerar el tiempo de valor de las inversiones digitales.
"El gasto en IT de las empresas es a prueba de recesión"
"Las empresas utilizarán la tecnología digital principalmente para remodelar su flujo de ingresos, añadiendo nuevos productos y servicios, cambiando el flujo de caja de los productos y servicios existentes, así como cambiando la propuesta de valor de los productos y servicios existentes", dijo Lovelock. "Esta tendencia ha alimentado el cambio de la compra de tecnología a la construcción, composición y ensamblaje de tecnología para satisfacer los impulsores específicos del negocio. Este cambio es fundamental para el crecimiento de la nube frente a las instalaciones para el nuevo gasto en IT".
"Sin embargo, a medida que las organizaciones buscan también la eficiencia de las operaciones, la reducción de costes y/o la evitación de costes durante la actual incertidumbre económica, se están añadiendo a la lista de proyectos de transformación digital las necesidades operativas y de back-office más tradicionales de los departamentos ajenos a IT.
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