El estándar de regulación que propone el Grupo de Acción Financiera (GAFI) se centra en la lucha contra el blanqueo de dinero y la financiación de los grupos terroristas. Como parte de la cumbre del G20 que se ha celebrado en Japón y donde Trump ha reabierto la puerta a las negociaciones comerciales con China, los representantes de las naciones que forman el grupo decidieron adoptar la regulación de criptomonedas.
Las nuevas recomendaciones del GAFI quieren regular a las casas de cambio, custodios y fondos de inversión en criptomonedas para que cumplan con procedimientos más rigurosos que el extendido KYC (conoce a tu cliente) que aplican la mayoría.
Las cripto “no representan una amenaza para la estabilidad financiera mundial en este momento”
Como gran novedad, las medidas apuntan a que las criptobolsas y otros servicios tendrán que compartir entre ellos la información de sus usuarios. Asimismo, las compañías estarán obligadas a notificar los movimientos de fondos de sus clientes, no sólo los registros.
En este sentido, en un comunicado, los representantes apuntaban a que las cripto “no representan una amenaza para la estabilidad financiera mundial en este momento” y que “las innovaciones tecnológicas, incluidos los criptoactivos, pueden ofrecer significativos beneficios al sistema financiero y a la economía en general”.
El ecosistema critpo, preocupado por la decisión
Desde el ecosistema de las criptomonedas preocupa la exigencia de compartir datos de clientes a través de las transacciones. Por ello, más de 200 personalidades del área acudieron a la reunión con el GAFI y aprovecharon para apelar la propuesta, pero el organismo dejó claro la intención de seguir adelante con el nuevo marco regulatorio.
Estas recomendaciones del GAFI no son vinculantes, pero el organismo cuenta con los reguladores de sistemas financieros más grandes del mundo por lo que generalmente las propuestas son adoptadas sin mayor rechazo por parte de las naciones, una cuestión que queda ratificada con la decisión del G20
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