Más del 50% de los adolescentes ocultan su actividad en línea limpiando su historial de navegación, cerrando o minimizando el explorador cuando sus padres están cerca, borrando mensajes de chat y videos, navegando en modo incógnito, usando un dispositivo que sus padres no revisan o mintiendo u omitiendo detalles sobre lo que están haciendo en internet en conversaciones familiares. Los expertos creen que es necesario educar a los adolescentes en seguridad en línea y utilizar herramientas de control parental para protegerlos de riesgos como el ciberacoso y el uso no autorizado de datos personales.
Es importante que los padres estén conscientes de la actividad en línea de sus hijos y tomen medidas para proteger su seguridad en línea. Esto incluye educar a los adolescentes sobre los riesgos en línea y establecer reglas claras sobre el uso de internet. También se recomienda utilizar herramientas de control parental que permitan monitorear y limitar el acceso a ciertos sitios web o aplicaciones. Además, es fundamental fomentar una comunicación abierta y confiable con los adolescentes para que se sientan cómodos compartiendo cualquier problema o preocupación que puedan tener en línea.
Es importante destacar que los adolescentes pueden ser reservados sobre su actividad en línea, pero esto no significa que no necesiten protección. Los riesgos en línea, como el ciberacoso y el robo de cuentas en línea, son reales y pueden tener consecuencias graves para los adolescentes. Por lo tanto, es responsabilidad de los padres y educadores brindarles las herramientas y el apoyo necesarios para navegar de manera segura en el mundo digital.
Por su parte, Albert Jové, profesor colaborador de los Estudios de Informática, Multimedia y Telecomunicación de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), ha dicho que "que los hijos son más expertos que sus padres en el uso de la tecnología es un hecho objetivo del cual deriva una consecuencia: los padres no saben cómo controlar el uso que dan sus hijos a la tecnología. Las continuas noticias de acoso escolar, phishing o estafas, muchas veces con consecuencias tan dramáticas como el incremento de suicidios de menores, no hacen más que alarmar a la sociedad, que se pregunta qué puede hacer".
Más allá de las medidas técnicas, sin duda muy necesarias, hay que tener grandes dosis de sentido común y transmitirlo a los hijos, que deben sentirse apoyados ante cualquier incidente. Según Jové, es importante establecer una relación de confianza con los hijos, donde los padres sean personas que les ayuden ante los retos a los que se enfrentan. Los padres deben tener la certeza de que, si cometen un error, lo pueden hablar con sus padres y estos les ayudarán a solventarlo.
Además, es fundamental que los padres se formen y adquieran conocimientos sobre la seguridad en línea para poder proteger a los adolescentes de los potenciales peligros a los que pueden estar expuestos al acceder a internet. También es importante que los padres prediquen con el ejemplo, evitando subir fotos a cada momento en las redes o sabiendo desconectar de internet en casa. Educar en la mirada crítica y enseñar a los menores a contrastar siempre las fuentes en la medida de lo posible también es clave.
Otro aspecto importante es recordar a los hijos la importancia de proteger sus datos y ser precavidos con la información que dan en línea. Además, se debe explicar a los adolescentes cómo deben actuar ante posibles amenazas y evitar responder a mensajes amenazantes, acosadores o que incomoden. Por último, se recomienda hacer uso de herramientas de seguridad en los dispositivos, como antivirus y softwares de control parental, para proteger a los adolescentes en línea
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