MWC 2009 Lo que esperamos

A modo de guión, podemos hacer un resumen de lo que esperamos o de lo que no deberíamos perdernos:
En cuestión de redes, es el año de LTE; veremos soluciones donde los Mega bits por segundo (Mbps) serán de tres cifras; velocidades de vértigo y anchos de banda que nos llevarán a un mundo que aún nadie imagina pero que en menos de un lustro estará implantado. Con el estándar aprobado (3GPP-8) y a punto de empezar la fase de pruebas e incluso algún despliegue, hay que destacar soluciones sorprendentes como la de Huawei, ese gigante que ‘piano, piano’ va creciendo y nunca nos deja indiferentes. La compañía China mostrará una solución de acceso a la cuarta generación sin necesidad de realizar el, hasta ahora, necesario cambio de infraestructuras. Su nuevo software puede evolucionar desde GSM hasta LTE realizando el correspondiente recorrido para no dejar a nadie sin cobertura.
Nokia Siemens Networks opta por aumentar la capacidad de MIMO, por la interoperabilidad y la optimización del espectro. Sus ‘relaying  base station’ aportan no sólo una solución más económica que otras existentes sino que busca optimizar la experiencia de usuario.
Pero tanto Nokia como Huawei tendrán que luchar contra el líder indiscutible: Ericsson y verse las caras en algunos puntos del planeta con Motorola, Nortel (quien por cierto con Fernando Valdivielso al frente ha firmado un año magnífico en España), Alcatel-Lucent, Nec, etc.
Esperamos, así mismo, que se anuncien aumentos de velocidad sobre HSPA (por lo menos hasta 21 Mbps en tarjetas de datos); soluciones avanzadas de WiMax y en cuestión de redes personales, evoluciones en Bluetooth, DLNA o terminales con NFC (Near Field Comunications) integrado.

Sistemas operativos
Pero menos ardua y más llamativa va a ser la revolución de los sistemas operativos (SO). Hace más de una año, que empezamos a decir que tenía que haber una estandarización en este campo, que no pueden quedar más de cinco o seis en el mercado y, a todas luces, no estábamos equivocados. Pero ahora, la pregunta es: ¿cuáles van a ser?
La entrada de nuevos agentes en el mercado como Apple o Google ha despertado del letargo a todos aquellos que dormían en el sueño de los justos y se conformaban con ir sacando terminales que evolucionaban poquito a poquito. Así, han surgido autenticas movilizaciones como la compra de Symbian por Nokia y la creación de la Fundación Symbian, o el cambio radical de Palm con el lanzamiento de un nuevo sistema operativo que ha impresionado a propios y ajenos: WebOS.
Así, no la batalla, ya que los escarceos empezaron hace mucho, sino la madre de todas las batallas está servida. El foco, a partir de ahora, a partir del Mobile World Congress, no van a ser los terminales, sino el software, la experiencia de usuario, la descarga de aplicaciones. La nueva versión de Windows Mobile, Google Android, las diferentes versiones de Symbian (para pantallas táctiles o analógicas), Palm WebOS y Blackberry irán en busca de la masa, del mercado profesional, de su sitio.
Sin embargo, hay que estar atentos a los próximos movimientos de marcas consolidadas y siempre sorprendentes que cuentan con un público fiel como Sony Ericsson. Tampoco hay que perder de vista la salud de Steve Jobs, tanto personal como tecnológica; LG jugará con varias barajas y Motorola ya anunció que abandona su SO propietario y se sube al carro de los grandes.
Es posible que los Widgets (pequeñas aplicaciones) y las plataformas basadas en ellos como ‘Plaza’ de Qualcomm tengan que verse las caras con soluciones ‘always on’ o interfaces absolutamente personalizables donde todo se mueve, coloca, aparece o desaparece a gusto del usuario, como si de un ordenador se tratara.

Terminales
Por supuesto, no faltará la fiesta de las presentaciones de producto. Veremos decenas de nuevos modelos con teclados táctiles (el iPhone ya no será el único multitouch), analógicos o dobles (QWERTY y alfanuméricos). Palabras como retroalimentación háptica o sensor de movimiento ya no serán novedad, pero tendremos que estar atentos a la especialización de los terminales, a la reducción en el consumo de batería, a la integración de canceladores de ruido y aceleradores de gráficos; pero, sobre todo, a la  nueva segmentación.
¿Por qué? Porque los hasta ahora teléfonos con sistemas propietarios van a converger con las PDAs y éstas pasarán a ser mini ordenadores. A partir de ahora, es posible que podamos dividir el mercado en cuatro categorías: teléfonos básicos, teléfonos específicos (feature phones), smartphones (con gama alta y baja) y terminales convergentes (pequeños PCs con conexión integrada).
La apuesta por los teléfonos-reproductor (Nokia anuncia un nuevo Xpress Music), los teléfonos-cámara (Samsung presentará hasta 12 Mpx) o los teléfonos-navegador (esperamos los nuevos Google Android de diversas marcas) será decisiva, pero sin abandonar nunca la gama profesional o los MODEMs de datos que ahora alcanzarán el mercado residencial.
Otra cosa, los navegadores GPS. Su evolución no hace ruido pero es espectacular. Es probable que marcas como Mio nos sorprendan con un nuevo tipo de convergencia.
Las curiosidades, habrá que esperar a verlas (NTTDoCoMo con Hitachi ha anunciado interfaces en 3D). Las novedades, algunas las contamos, presentamos o analizamos en este mismo número; otras las iremos desgranando a lo largo del año.
Pero habrá una palabra que cobrará gran relevancia y será protagonista: APLICACIONES.

La feria
Al igual que en los últimos cuatro años, tendrá lugar en la Fira de Barcelona. La organización corre a cargo de la GSMA, la asociación que reúne a los operadores de telefonía móvil del mundo. Se esperan 50.000 visitantes y ocupará no sólo los pabellones disponibles habitualmente en el recinto, sino decenas de anexos y carpas de mayor o menor tamaño dispuestos en los bajos de Monjuic.
A pesar de que la feria ha cobrado dimensiones desproporcionadas, su prestigio viene dado por su programa de conferencias y los ponentes que hablan en las mismas. En el MWC, si tuviera alfombra, veríamos pasear sobre ella a todos los números uno, dos y tres del sector de las telecomunicaciones en el mundo.
El idioma oficial es el inglés y la moneda de cambio las tarjetas de visita.
Se entregarán los premios oficiales, el cine y la música tendrán su apartado especial y los taxistas, hoteles y restaurantes de la Ciudad Condal harán su agosto. Pero, tanto va el cántaro a la fuente que al final se rompe y se rumorea que Sarkozy y Carla Bruni se esfuerzan en ganar la partida a Montilla y a Zapatero.
¿Habrá MWC en Barcelona el año que viene? o preparamos los billetes para volar hasta…. ¿París?