El operador de telecomunicaciones ruso MTS va a ser denunciado por un grupo llamado Anti-Corruption Foundation porque, según ellos, MTS ayudó al Servicio Federal de Seguridad de Rusia a entrar en las cuentas de Telegram de los activistas Oleg Kozlovsky y Georgy Alburov.
Los dos activistas rusos han presentado documentos que muestran como el operador móvil ruso ayudó a unos intrusos no identificados a entrar en sus cuentas de Telegram, el servicio de mensajería instantánea que se jacta de ser el más seguro del mundo.
Es cierto que la ley rusa permite al FSB (Servicio Federal de Seguridad) entrar en los datos de algún investigado por delito, pero siempre con la aprobación de un juez. Este no es el caso ya que tanto Oleg como Georgy no han cometido delitos.
La intrusión en las cuentas de estos activistas se ha llevado a cabo a través de una falsificación de los códigos PIN de acceso a la cuenta enviados por SMS. Es posible que MTS apagará sus servicios de mensajería de texto y mientras alguien usando la red Tor consiguiera los códigos para acceder a las cuentas. Las víctimas se enteraron porque les llego una notificación de entrada al servicio desde otro dispositivo.
En favor de Telegram hay que decir que los dos activistas no tenían activado el segundo factor de autenticación y no usaban los chats secretos, dos medidas que hacen de Telegram un servicio casi indescifrable.
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