Los teléfonos móviles y tabletas comercializados en la Unión Europea deberán incorporar un etiquetado energético obligatorio.
A partir de hoy 20 de junio de 2025, la Unión Europea hace obligatoria una normativa que exige a los fabricantes de teléfonos móviles y tabletas incluir una etiqueta energética estandarizada en sus productos. Esta etiqueta proporcionará información detallada sobre la eficiencia energética del dispositivo, la autonomía de la batería, la resistencia a caídas, la facilidad de reparación y la protección contra polvo y humedad. El objetivo es fomentar decisiones de compra más informadas y sostenibles, promoviendo la economía circular y reduciendo el impacto ambiental de estos dispositivos electrónicos.
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