El directivo ha defendido que su objetivo es “garantizar que volvemos al crecimiento, a la sostenibilidad”. “Sé que hay dudas sobre si Vodafone será vendida en España, pero yo no soy dueño de Vodafone. Quien vende las empresas son los dueños”, ha matizado Vaz.
“Sé que es una pregunta que está ahí cada año, pero nosotros llevamos 28 años en España y hemos invertido más de 60.000 millones de euros en este mercado y seguiremos siendo un operador que es motor de innovación”, señala. “Facturamos 4.000 millones de euros y tenemos más de 15 millones de clientes y 3.800 empelados que son referencia”, recuerda Vaz.
De este modo, el directivo ha asegurado que “seguiremos muy comprometidos con la economía y la sociedad en España y nosotros estamos con ganas de ganar”.
Gayo (Telefónica): “Hay que encontrar una nueva estructura de mercado y eso implica hablar de consolidaciones”
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El reto de la inversión
Durante su primera intervención pública desde que asumiera el cargo de CEO, Vaz ha defendido que “las redes de telecomunicaciones son críticas” para el futuro de la economía.
El directivo ha incidido en que estas redes tienen “un grado de inversiones muy grande para poder acomodar todas las cantidades datos y el crecimiento exponencial de estos datos que se espera” y advierte que “no podemos competir con los otros bloques si no afrontamos el reto de las inversiones en infraestructuras”.
Vaz reclama "políticas proinversión que nos permitan consolidar las infraestructuras de red como la primera palanca de productividad y como aceleradora del crecimiento del país”
Para afrontar este reto, el CEO de Vodafone España apunta que “nuestro futuro, como sector, sociedad y país, se determinará en función de las decisiones regulatorias y políticas que se tomen hoy, y nos sitúa ante la responsabilidad de actuar de forma inteligente, impulsando las políticas proinversión que nos permitan consolidar las infraestructuras de red como la primera palanca de productividad y como aceleradora del crecimiento del país”.
En esta línea, Vaz advierte de “una estructura de mercado hipercompetitiva y extremadamente fragmentada” que “ha propiciado una dinámica destructiva de un sector clave, erosionando los ingresos, los márgenes e impulsando la rentabilidad negativa de las operadoras”.
Fair share
Vaz ha señalado que el 55% del tráfico en las redes está generado por cinco grandes compañías tecnológicas y asegura que es “justo solicitar que estas compañías ayuden a financiar los costes de despliegue de la conectividad a futuro”, ya que la gestión del tráfico de estas compañías en las redes de telecomunicaciones europeas tiene un coste anual entre 36.000 y 40.000 millones de euros para los operadores. “No es justo que nosotros paguemos las facturas de este tráfico. No entiendo por qué hay debate sobre este tema”, asegura el directivo de Vodafone.
Así, el directivo luso coincide con Emilio Gayo y apuesta por configurar una estructura de mercado más sostenible desde el punto de la escala y la rentabilidad porque “las decisiones que se tomen desde el punto de vista regulatorio y político tienen impacto, no solamente en la competencia, sino también en la viabilidad de todo un sector y del país a futuro”.
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