¿Qué hace esa foto del Camp Nou aquí? Sencillo: Telefónica lo ha convertido en el primer estado con cobertura 5G dedicada. ¿Una muestra de cómo se puede financiar?
La pesadilla de este MWC era el 5G. Llevamos tres años hablando de lo mismo y parecía que esta edición iba a ser como El día de la marmota: otra vez con el 5G a vueltas. Sin embargo, no ha sido así del todo. Es cierto que la nueva generación de telefonía móvil sigue sin desplegarse en la mayor parte del mundo, incluida España, pero está madurando a pasos agigantados y se comienza a pasar de pruebas piloto efímeras a instalaciones fijas.
Uno de los ejemplos de esta última es el Camp Nou. Telefónica ha creado en el campo del Fútbol Club Barcelona el primer estadio con cobertura estándar 5G dedicada. El punto clave de esta acción, enmarcada dentro de la llamada iniciativa 5G Barcelona, no es que los asistentes al estadio se puedan comunicar o bajar datos o ver la retransmisión del partido mientras están en el propio estadio (que también) sino poder ofrecer los partidos de una forma diferente.
La piedra clave del 5G no es la tecnología en sí -ya está desarrollada y demostrada fuera de laboratorio- sino quién va a pagar el carísimo despliegue. Si el 4G fue oneroso, el 5G necesita una infraestructura de antenas cuatro veces mayor, así que hay que buscar formas de amortizarlo. Y una de ellas puede ser, de nuevo, el deporte. Esta nueva tecnología, junto con el edge computing, permite la instalación de cámaras inalámbricas 360 distribuidas por todo el estadio, incluso se podrán colocar en la equipación de los jugadores. Los espectadores podrían optar sobre la marcha si quieren ver una jugada desde el punto subjetivo del portero, el atacante o el árbitro.
Pero si el 5G es la preocupación general del sector de las telecomunicaciones, Telefónica tiene otro punto del que no puede apartar la mirada: su cuarta plataforma y el proyecto Aura con su Movistar Home, una obra magna, faraónica, en la que cuentan con el apoyo de Microsoft. En este escenario es donde se enmarca el acto conjunto de José María Álvarez-Pallete, presidente de Telefónica, y Satya Nadella, presidente de Microsoft. Y es que la nube en la que residirán las app de Aura será Azure, de Microsoft.
A pesar del atractivo de dos pesos pesados como los presidentes de Telefonica y Microsoft, fueron superados en cuanto a asistencia de público por el mano a mano entre Broncano y Berto Romero. Claro que no hacía falta registrarse…
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