MasOrange confía en encontrar un socio para la joint venture con Vodafone en el tercer trimestre del año

En este sentido, Spenger ha confirmado que ya se ha cerrado la financiación bancaria, “que es lo más relevante”, y ha anunciado que siguen avanzando en cerrar un acuerdo con un equity partner que “esperamos firmar en el tercer trimestre del año”.

Spenger ha reiterado que el reparto accionarial inicial se mantiene sin cambios: MasOrange conservará el 50% de la participación en la futura compañía, Vodafone contará con un 10% y el socio financiero, aún por confirmar, dispondrá del 40% restante. El directivo ha evitado valorar los nombres que se han publicado en prensa, como el del fondo soberano de Singapur (GIC), o los de las firmas de inversión KKR y Brookfield, que también están involucradas en el proceso. “No tenemos prisa, pero esperamos poder firmarlo en el tercer trimestre”, ha subrayado.

"Es más eficiente que dos empresas se encarguen juntas del mantenimiento y evolución de las redes”

Durante su intervención, Spenger ha insistido en las ventajas industriales y económicas que supondrá la creación de esta sociedad conjunta, conocida internamente como proyecto SURF. “Es más eficiente que dos empresas se encarguen juntas del mantenimiento y evolución de las redes”, ha asegurado. También ha apuntado a la simplificación en la gestión de las acometidas y la posibilidad de compartir equipamiento técnico, como routers, en los casos de portabilidad entre operadores.

Desde el punto de vista financiero, el CEO ha remarcado que la operación representa una vía para reforzar la capacidad inversora de MasOrange al mismo tiempo que contribuye a reducir su nivel de endeudamiento. “A nivel financiero, tiene ventajas para reducir la deuda de MasOrange y para elevar nuestra capacidad de inversión, así como en participar en los dividendos que se puedan generar”, ha afirmado.

En relación con la financiación de la FiberCo, Spenger ha recordado que MasOrange ya cerró a finales de mayo un acuerdo bancario por valor de 11.000 millones de euros. De esta suma, 6.250 millones se destinarán a mejorar las condiciones de deuda del grupo, mientras que los 4.750 millones restantes están dirigidos específicamente al despliegue de infraestructura de la nueva compañía.

Choque entre el Gobierno y las telecos por el control del espectro

Spenger reclama una nueva regulación

Asimismo, el CEO ha hecho un llamamiento a la revisión del marco regulatorio y fiscal del sector, aludiendo a la necesidad de actualizar unas normas “que fueron diseñadas cuando los ingresos eran el doble de los actuales”. En particular, ha cuestionado la carga impositiva asociada al espectro radioeléctrico, y ha instado a una adaptación del entorno fiscal para asegurar la competitividad del sector de telecomunicaciones en el contexto europeo.

“El proyecto va bien”, ha concluido Spenger, insistiendo en que la joint venture no solo generará valor para sus accionistas, sino que tendrá un impacto significativo para el país en términos de conectividad, eficiencia y sostenibilidad del despliegue de redes de última generación.