El Consejo de Ministros ha dado luz verde a la participación con 20 millones de euros en el fondo Armilar Venture Partners IV, especializado en sectores estratégicos como la inteligencia artificial, la digitalización, la gestión de datos o la conectividad
Esta inversión, que se realizará a través de la Sociedad Española para la Transformación Tecnológica (SETT), el Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública, se articulará mediante el fondo Next Tech, que busca canalizar capital hacia startups y scaleups tecnológicas en fases iniciales, con especial atención a aquellas radicadas en España.
Estas empresas, caracterizadas por su enfoque en tecnologías emergentes y disruptivas, son consideradas clave en la aceleración del proceso de transición digital y la transformación productiva del país.
Fondo con respaldo europeo y vocación internacional
El fondo Armilar Venture Partners IV cuenta con el respaldo de actores de referencia en el capital riesgo. La sociedad gestora, Armilar Venture Partners, fundada en el año 2000, ha desarrollado una amplia trayectoria en el impulso de compañías innovadoras en sectores como el software de gestión, la computación en la nube, los semiconductores, la ciberseguridad o la monitorización de pacientes. Su cartera supera las 70 inversiones en nueve países y ha logrado la salida exitosa de trece de ellas, incluyendo dos unicornios y tres dragones, lo que acredita su capacidad para generar retornos significativos.
La inversión de la SETT representa el 16,6% del total invertido
La participación del Fondo Europeo de Inversiones (FEI), que aportará 40 millones de euros, consolida la proyección internacional de esta operación y refuerza la credibilidad del fondo a nivel europeo. Esta colaboración con la SETT, que representa el 16,6% del total invertido, responde a un modelo de impulso público-privado que pretende dinamizar el mercado tecnológico y atraer inversores privados hacia sectores de alto valor añadido.
El fondo tiene un enfoque sectorial claro: priorizar empresas que operan en tecnologías consideradas críticas para el futuro económico y digital de Europa. Se incluyen áreas como la inteligencia artificial, los sistemas medtech, el software avanzado, la sostenibilidad, el clima y la digitalización de industrias.
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