Esta semana se cumplen 10 años de la primera venta de un iPhone y sigue siendo uno de los terminales más exitosos del mercado y de la historia de Apple, pero para cuando celebre sus próximos 10 años este móvil realmente habrá salido totalmente del concepto de smartphone como lo conocemos hoy en día, como seguramente sucederá con el resto de los dispositivos de otras marcas.
Seguramente pudiera ser que aún se venda un rectángulo brillante que guardemos en nuestro bolsillo, pero también sus habilidades y aplicaciones podrían migrar a sensores en el cuerpo, wearables para los oídos, gafas, ropa, incluso podríamos tener un iPhone plegagle o que se enrolle como un papiro en nuestras muñecas.
Sin embargo tratar de predecir el destino de la tecnología dentro de una década es un error y una tontería, porque la verdad nadie sabe hacia donde nos llevará este tren acelerado de la evolución.
Pero poder tener una idea de hacia dónde irá Apple en breve puede ser posible. Esta empresa ha ido colocando cada vez más potentes microprocesadores, y más radios inalámbricos, en cada uno de sus terminales. También vemos como Siri se hace más inteligente y aparece en muchos más lugares y dispositivos. Incluso vemos como Apple tiene sus ojos puestos en la realidad aumentada, ofreciendo a los desarrolladores la posibilidad de crear aplicaciones en su plataforma.
Vemos una nueva versión de iOS 11 que posee con una integración mucho más profunda con Siri, lo que da una muestra de que Apple espera que en un futuro su asistente virtual sea capaz de hacer casi todo en sus teléfonos.
Incluso en breve veremos como el iPhone se transformará en una llave electrónica y un mando para casi todo lo que nos rodea, la abrupta llegada del Internet de las Cosas y los hogares inteligentes hará que el móvil sea el centro de operaciones para gestionarlo casi todo, asistido por supuesto con Siri.
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