Actualización
Son muchas las cosas que se comentan en la red sobre la actualización de Android para el denominado 'flagship' de Samsung 2018, el Galaxy S9. Y el móvil que se presentó la pasada primavera es noticia ahora porque, a pesar de las dudas que albergaban los técnicos por el sistema de refrigeración que lleva integrado, el S9 podrá adoptar la función de CPU sin ncesidad de utilizar el Dex, simplemente conectando un cable a la pantalla.
Por qué antes no y ahora sí parece ser la cuestión y la respuesta la optimización de los recursos energéticos que realiza el nuevo sistema operativo de Google
Desde el día en que el Galaxy S9 vio la luz, en Barcelona, con una primera toma de contacto a través de realidad aumentada (con una app AR veías el móvil sobre la acreditación y lo podías cambiar de color), ya se sabía que se trataba de un smartphone espectacular. La leyenda de la invitación decía: The camera. Reimagined y, efectivamente, de la cámara hay mucho que decir; ya que, junto al procesador, es probablemente la justificación del precio (849-949 €), pero no es lo único. Convivir con el Galaxy S9 es entrar en sus detalles, en los del sistema operativo Android Oreo (8.0), en los de su configuración y, desde luego, en los de su utilidad
Los rumores Con más o menos reconocimiento público (algo que depende de lo importante que resulte Samsung para el medio en cuestión), son varios los mantras que han surgido con respecto al S9, especialmente por los incondicionales de Apple que todo lo comparan con algún terminal de la marca:
1. El diseño es igual que el S8, pero con el lector de huellas en otra posición. Y efectivamente, los coreanos han encontrado una línea de identidad que les funciona y, como otras marcas, Cupertino incluido, se quedan con lo bueno y corrigen lo menos bueno del formato anterior. Y, sí, es verdad que han cambiado el lector de huellas que se usa no sólo para desbloquear el móvil, sino para otras funciones como abrir aplicaciones bancarias o para pagar mediante Samsung Pay; lo cual, en el caso del S8 conlleva que cada vez que te dispones a sacar una foto, aparece un aviso que reza: “con un objetivo limpio se obtienen mejores imágenes”. Por tanto, mejor en un sitio donde no lo confundes con el objetivo.
2. Ha habido quejas de la batería; pero en nuestro caso, hemos de decir que quien haya tenido problemas consideramos puede tener un error de configuración, porque con un uso intensivo (sin horas de juegos y videos), la pantalla configurada en FHD+, tiempo de espera de 15 segundos y brillo automático, transcurre el día y al llegar la noche aún resta entre un 20 y un 40% de una batería de 3.000 mAh. Lo cual, en modo ahorro máximo supone otras 33 horas de vida útil. Además, la velocidad de carga es vertiginosa. En definitiva, en 15 días de uso continuado, no hemos tenido necesidad de recargarlo fuera de los tiempos y los lugares lógicos, ni de llevar un power bank.
3. Falla el reconocimiento facial. Si modificas el perfil (por ejemplo, si llevas las gafas puestas), sí. Y en condiciones de luz muy difíciles, es menos efectivo (rápido). Si la luz es buena, no hay tiempo para pensar si funciona o no, porque el S9 está desbloqueado cuando quieres usarlo. Ahora bien, pese a las modas o a la obsesión por la seguridad, el hecho de situar el lector de huella en el lugar ergonómicamente correcto lleva al desbloqueo por impulso: al coger el móvil pones el dedo en el lugar adecuado y ya no hace falta nada más.
4. Bixby no habla español. Cierto. De hecho, a pesar de las muchas cosas que se pueden hacer si sabes inglés, verte hablando con tu móvil en un idioma que no es el tuyo - especialmente si te oye alguien- resulta ridículo y optas por el teclado o por Google Voice, con el que se interactúa con bastante naturalidad. Otro fallo, es que ‘no oye bien’ y en muchas ocasiones hay que hablarle alto y claro para que se despierte. Igualmente, muchas veces debes volver a la página principal para utilizarlo.
Sin embargo, Bixby ha mejorado infinitamente y en cuanto le coges el truco, ya no quieres dejarlo; pero de eso hablaremos más adelante.
El diseño
Repetimos, una y mil veces, que sobre gustos no hay nada escrito; pero el éxito de los Galaxy abala el trabajo de un equipo que desde Corea lanza al mundo sus últimas propuestas. En este caso, la principal novedad es el color y, en concreto, el tono elegido para la publicidad y para las demos de prensa (al menos la nuestra) es un rosa amoratado -seguro que tiene un nombre más atractivo que ese- que le confiere no sólo personalidad, sino un toque de reivindicación feminista, tan en boga en estos días. Cuestión indiscutible es que, apoyado por el brillo de la trasera, nos facilita encontrarlo en bolsos y mochilas donde los negros se vuelven más profundos que nunca. Grip correcto y unas medidas de 14,77 x 6,87 x 0,85 cm que lo hacen suficientemente manejable.
La cámara
La cámara del S9 gestiona dos tipos de aperturas: una para el día de f/2.4 y otra para la noche o para condiciones de muy baja luminosidad (oscuridad total) de f/1.5. Además, juega con tomas ‘multi frame’ para reducir el ruido en las fotografías. Esa cámara principal dispone de un sensor de 12 Mpx super Dual Pixel con OIS y se apoya en otra, la frontal de 8 Mpx.
Novedad reseñable es el modo ‘Súper Slow Mo’ o súper cámara lenta, mediante el cual un clip de grabación de 0,2 seg se convierte al reproducirlo en un fragmento de 6,3 seg y combina el sensor de imagen con el procesador de imagen (ISP). Así mismo, integra un detector automático de movimiento y se puede añadir cualquier tipo de sonido o música de forma muy sencilla.
Emojis y Bixby visión
Un paso más allá y en el ámbito de la diversión, la cámara del Galaxy S9 ofrece un modo que diseña un Emoji de nuestra propia imagen e incluso al cual se le puede añadir movimiento. Nuestro Emoji autorretrato se asocia a 18 estados de ánimo diferentes, pero si bien sabemos que son simples avatares, los resultados obtenidos son bastante menos llamativos que otros como los que nos ofrecen terminales mucho más baratos como los Honor.
Otra herramienta que evoluciona es Bixby Vision, ya que, ahora, aporta información en tiempo real de lo que tenemos alrededor; traducción instantánea de señales (no es perfecta pero sí suficiente), realidad aumentada en nuestro entorno (información de monumentos, puntos de interés, etc.) e incluso en su función comida, nos dice las calorías de lo que vamos a consumir (no reconoce envoltorios sino contenido). Sonido Dolby Atmos con altavoces AKG.
En el ámbito del entretenimiento o de entorno multimedia, Samsung refuerza no sólo la imagen, sino también el sonido con dos altavoces, muy bien situados en la base y en la cabecera, estéreo, AKG; los cuales, vinculados al sistema Dolby Atmos (integra cada elemento de sonido por separado hasta componer una pieza única), multiplica por 1.4 la potencia y calidad del sonido de otros terminales de la marca. Y realmente, el altavoz auxiliar sobra. Si queremos más, lleva salida de audio para Jack de 3.5 mm.
Pantalla infinita e inmersiva
Con dos tamaños de pantalla, 5,8 y 6,2 pulgadas de diagonal (el último para el modelo plus), el fabricante sigue apostando por su tecnología Super AMOLED, con cristal curvo y efecto 2.5 D; y una relación de aspecto de 18.5:9. El cristal que lo cubre es de 0,6 mm, Gorilla Glass 5.
Exynos 9810, muy potente
En el corazón del Galaxy S9 hay un procesador Exynos 9810 de 10nm, a 64 bit, de ocho núcleos, el cual se equipara con el Snapdragon 845 de Qualcomm (lo implementa sólo en EE.UU. Esta generación de procesadores ya presume de inteligencia artificial con aprendizaje profundo (machine learning) basado en redes neuronales (estructura de capas) y de una mayor eficiencia energética. En términos de conectividad, ninguna dificultad: versión 5 de Bluetooth; WiFi 802.11 a/b/g/n AC (VHT 80) y conexión a las redes celulares de telefonía móvil de cuarta generación (4G+ LTE) categoría 18, MIMO 4x4 QAM 1024 y posibilidad de agregar bandas no sólo licenciadas (CA- Carrier agregation) sino también libres (LAA - Licenced Assisted Access); por tanto, puede superar el Gbps si la red del operador lo permite.
También dispone de sistemas ANT+ para comunicar sensores que realizan mediciones físicas (pulso, pasos, etc) y como sistemas de geoposicionamiento, GPS, Glonass, Galileo y Beidu (los dos últimos incompletos).
La memoria del terminal de prueba es de 64 GB con una RAM de 4GB, pero hay configuraciones superiores que, paulatina mente, aumentan también el precio hasta los 1049 en el S9+ con 256 GB. Parte de la memoria la ocupa el sistema operativo Android 8.0 Oreo.