Las personas que tienen smartphones tienen familiaridad con los servicios de internet móvil y saben utilizar el internet con mayor frecuencia. Esto también se debe a que realizan diferentes tareas con su smartphone.
Es decir, de los 4.600 millones de personas que ahora utilizan Internet móvil, casi 4.000 millones, es decir, el 49% lo hacen mediante un teléfono inteligente, lo que representa casi la mitad de la población mundial. En paralelo, 600 millones de personas, el 8% de la población mundial, acceden a Internet utilizando un teléfono básico.
Un aspecto que resalta el informe, está relacionado con la banda ancha móvil. En este aspecto, el informe explica que gracias a la expansión de las 4G y 5G más del 69% de los propietarios de teléfonos inteligentes pueden acceder a banda ancha móvil a través de dispositivos habilitados para 4G, mientras que el 17% lo hace a través de dispositivos habilitados para 5G. Esta tendencia se ha visto especialmente en América del Norte y Asia Oriental y el Pacífico. Sin embargo, en África subsahariana, el 69% de los teléfonos inteligentes utilizados para acceder a Internet móvil todavía son compatibles solo con 3G, mientras que en Oriente Medio y el Norte de África, el porcentaje es del 33%. Esto significa que las redes 2G y 3G siguen siendo importantes para millones de usuarios en países de ingresos bajos y medianos (LMIC).
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La conectividad a Internet móvil ofrece beneficios significativos tanto a nivel social como económico, mejorando el bienestar, aumentando el consumo de los hogares e impactando positivamente el PIB. A pesar de los avances realizados en los últimos años, el informe SOMIC muestra que el progreso se está desacelerando y se requiere una mayor acción para garantizar el acceso universal a Internet móvil.
Para lograr esto, la GSMA está llamando a una mayor colaboración entre todas las partes interesadas, incluyendo gobiernos, responsables de políticas y el ecosistema móvil. Es necesario superar las barreras de la brecha digital, proporcionar cobertura en áreas sin banda ancha móvil y abordar las barreras de uso. Estas acciones deben basarse en una comprensión de la brecha de uso, las necesidades de las personas que aún no utilizan Internet móvil, las barreras que enfrentan y las oportunidades para abordarlas.
Finalmente, aunque cada vez más personas están utilizando Internet móvil, todavía existen 3.400 millones de personas en el mundo (el 57% de la población mundial) que no están conectadas. La mayoría de estas personas viven en áreas cubiertas por una red de banda ancha móvil, lo que se conoce como brecha de uso. Aunque esta brecha se ha reducido ligeramente, pasando del 40% en 2021 al 38% en 2022, sigue siendo considerable, afectando a 3.000 millones de personas. En comparación, solo el 5% de las personas que no utilizan Internet móvil viven en áreas sin cobertura de banda ancha móvil, lo que se conoce como brecha de cobertura.
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