En un comunicado compartido en el marco de la FTTH Conference 2024 que se celebra estos días en Berlín, ELFA ha mostrado su apoyo a la ambición de la Unión Europea de llevar la fibra a todos los ciudadanos y empresas europeas para 2030.
Apoyo a la Unión Europea
“Es de esperar que la flexibilidad nacional proteja los procedimientos ya eficientes y racionalizados para la concesión de permisos y la coordinación de las obras civiles en los Estados miembros”
En este sentido, han aplaudido los esfuerzos de las instituciones europeas de cerrar un acuerdo para la Ley de Infraestructuras Gigabit (GIA) antes del final de mandato en verano, incluyendo una salvaguarda contra la sobreconstrucción anticompetitiva y celebran también que se busque implantar un amplio grado de flexibilidad nacional para los Estados miembros que permita exenciones de algunas obligaciones. “Es de esperar que la flexibilidad nacional proteja los procedimientos ya eficientes y racionalizados para la concesión de permisos y la coordinación de las obras civiles en los Estados miembros”, destacan.
Por otro lado, también se refieren en su comunicado al Libro Blanco de la Comisión Europea sobre infraestructuras digitales, que servirá como base para crear una Ley de Redes Digitales.
En este sentido, señalan que “el establecimiento de un objetivo político para la disponibilidad ubicua de fibra para 2030 puede animar aún más a los operadores de red representados por nuestros miembros en sus importantes esfuerzos para garantizar que todas las partes de Europa tengan acceso a la infraestructura de telecomunicaciones y computación más avanzada para seguir siendo innovadores y competitivos con otras regiones líderes a su debido tiempo”.
A pesar de ello, la alianza de operadores de fibra locales ha mostrado su escepticismo en algunos casos, como la convocatoria de Campeones Europeos, ya que consideran que “discriminaría al gran número de pequeños y medianos operadores que actualmente representan más del 50% de la disponibilidad de FTTH/B en toda Europa, o la promoción de la desregulación como objetivo inmediato”.
Las redes de cobre
Entre los objetivos fijados por la Comisión Europea para 2030 se encuentra también el apagado total del cobre. “Creemos que el mantenimiento de las redes de cobre y cable contribuyen en gran medida a retrasar el despliegue y la adopción de las redes de fibra en Europa”, apuntan desde ELFA.
En este sentido, la alianza considera que es “crucial” que los reguladores europeos desarrollen un marco “claro” que “garantice que las redes de cobre se eliminen exclusivamente en condiciones justas y que eviten distorsiones de la competencia por parte de las antiguas empresas estatales”.
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