La firma arranca con una cobertura superior a los 12 millones de unidades inmobiliarias y cerca de 5 millones de clientes conectados a su red FTTH. La propuesta nace con un objetivo claro: convertirse en un actor central para la digitalización del mercado español, impulsando despliegues más eficientes y aportando estabilidad a un sector en plena reconfiguración tras la fusión de Orange y MásMóvil y la adquisición de Vodafone por Zegona.
El nuevo vehículo queda repartido entre MasOrange (58%), Vodafone España (17%) y GIC (25%), lo que refleja el creciente interés de los fondos de infraestructuras por el negocio de fibra, considerado estable y con retornos predecibles a largo plazo.
Una infraestructura unificada para MasOrange y Vodafone
PremiumFiber operará como proveedor de referencia para los servicios fijos de MasOrange (que posee el 58% del capital) y Vodafone España (tiene el 17%), que integrarán sus despliegues FTTH en una única red bajo criterios de calidad premium. Ambos operadores ceden un volumen conjunto superior a 12 millones de UUII, consolidando una de las mayores infraestructuras de fibra de Europa por número de clientes atendidos.
La compañía arranca liderada por Blanca Ceña como consejera delegada, acompañada por un equipo directivo con amplia trayectoria en el sector. Según la CEO, el lanzamiento supone “una gran noticia para MasOrange y Vodafone, y también para el cliente español de telecomunicaciones”, al permitir el acceso a “la infraestructura de red más avanzada y de mayor calidad”, diseñada para facilitar la adopción rápida de nuevas tecnologías.
XGSPON y baja latencia como armas
Según aseguran desde la nueva compañía, la red FTTH se apoya en estándares de última generación como XGSPON, una evolución que multiplica la capacidad de transmisión y permitirá ofrecer velocidades simétricas muy superiores a las actuales.
Además, la infraestructura se ha diseñado para afrontar un escenario marcado por la consolidación del streaming en 4K, la proliferación de dispositivos conectados y la expansión de servicios sensibles a la latencia, como el gaming en la nube o la realidad extendida.
PremiumFiber operará bajo exigentes criterios de seguridad y resiliencia, incorporando tecnologías que elevan la protección frente a incidentes y ciberamenazas
Asimismo, PremiumFiber subraya que operará bajo exigentes criterios de seguridad y resiliencia, incorporando tecnologías que elevan la protección frente a incidentes y ciberamenazas.
En este sentido, el operador mayorista de fibra aspira a optimizar el uso de activos y reducir duplicidades en el mercado, un aspecto clave en un contexto en el que las grandes telecos europeas presionan para mejorar la rentabilidad de las redes fijas. La propia empresa señala que su modelo permitirá “una conectividad con la mayor fiabilidad y estabilidad del mercado”, con especial atención a entornos corporativos y de trabajo remoto, cada vez más dependientes de redes con baja latencia y alta disponibilidad.
Al mismo tiempo, su posición mayorista facilitará el acceso a una red avanzada a operadores regionales y marcas alternativas, favoreciendo la competencia y extendiendo la digitalización a zonas menos densamente pobladas.