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Por Alfonso de Castañeda
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miércoles 21 de noviembre de 2018, 20:17h

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El ciberataque que puso a la ciberseguridad en el mapa hace ya un año y medio sigue dando de qué hablar. WannaCry golpeó a medio mundo en mayo de 2017 y entre julio y septiembre de 2018 este ransomware ha afectado a casi 75.000 usuarios.

WannaCry es a día de hoy el número uno en la lista de familias de cifradores más extendidas. En concreto, el 28,72% de los usuarios atacados por cifradores en el tercer trimestre de 2018 corresponde a WannaCry. En concreto, 74.621 usuarios únicos por todo el mundo, una cifra que ha sufrido un sorprendente aumento durante este último año de dos tercios con respecto a las cifras del tercer trimestre de 2017, cuando tan sólo era del 16,78%, según se extrae de del informe de evolución de amenazas de TI del tercer trimestre de 2018 de la firma de ciberseguridad Kaspersky Lab.

Los ciberataques a escala mundial de mayo de 2017 son una de las mayores epidemias de ransomware de la historia de la ciberseguridad mundial a pesar de que Windows había publicado un parche para su sistema operativo que permitió cerrar la vulnerabilidad explotada por EternalBlue dos meses antes de que comenzaran los ataques.

"La creciente participación de los ataques WannaCry es otro recordatorio de que las epidemias no acaban tan rápidamente como empiezan, y siempre hay consecuencias que duran más"

Las devastadoras consecuencias de WannaCry todavía se notan en las oficinas de grandes compañías como Telefónica, golpeada duramente aquella jornada. Sin embargo, y pese a que ese día quedó latente la peligrosa amenaza que representan los cifradores y que la mayoría de los PCs de todo el mundo se actualizaron para resistir al exploit EternalBlue, las estadísticas muestran que los ciberdelincuentes aún usan los ordenadores que no han sido parcheados.

“La creciente participación de los ataques WannaCry es otro recordatorio de que las epidemias no acaban tan rápidamente como empiezan, y siempre hay consecuencias que duran más”, ha advertido Fedor Sinitsyn, analista de seguridad de Kaspersky Lab. “En el caso de los cifradores, los ataques pueden ser tan duros que es necesario tomar medidas preventivas y parchear el dispositivo mejor que tener que tratar con archivos cifrados más adelante” ha destacado el analista.

Kaspersky Lab ha registrado un 24,5% más de amenazas que en el segundo trimestre

Las soluciones de Kaspersky Lab detuvieron en el tercer trimestre 947 millones de ataques maliciosos procedentes de recursos online situados en casi 200 países y territorios de todo el mundo (un 1,7% menos que en el periodo anterior). Además, se han registrado 246,7 millones de URL únicas como maliciosas, un 29,9% menos que en el periodo anterior.

Por otro lado, 305.315 ordenadores sufrieron intentos de infección por malware con el objetivo de robar fondos a través del acceso online a cuentas bancarias, un incremento del 41,5% respecto al periodo anterior.

El antivirus de la firma rusa de ciberseguridad detectó 239 millones de objetos maliciosos únicos y potencialmente no deseados, una subida del 24,5% frente al periodo anterior.

En cuanto a los móviles, los productos de seguridad móvil de Kaspersky Lab detectaron 1.305.015 paquetes maliciosos de instalación, una caída del 25,2% frente al periodo anterior.

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