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Por Alfonso de Castañeda
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alfondcctelycom4com/8/8/17
martes 22 de noviembre de 2022, 14:00h

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A pesar de que el teletrabajo no termina de arraigarse en las empresas, sí son muchos los que han logrado esta libertad para trabajar desde donde quieran a raíz de la pandemia de la COVID-19. Sin embargo, dos años no han sido suficientes para ser conscientes de los retos a los que se enfrentan los teletrabajadores: organización del hogar, productividad, conectividad, salud…

Entre 6 y 9 horas pasa un profesional de media frente a su ordenador (o al ordenador del trabajo si su compañía se lo ha entregado), por lo que es necesario contar con un espacio bien decorador y organizado para mejorar el rendimiento laboral y reducir el cansancio.

Vestido y fuera de la cama

Son varios los aspectos que hay que tener en cuenta a la hora de afrontar el espacio que se usará para el teletrabajo, pero antes hay que empezar por uno mismo ya que diferentes estudios aseguran que es recomendable afrontar la jornada laboral vistiéndose como si se fuera a la oficina, evitando el uso de pijamas o ropas excesivamente cómodas, lo que provoca un cambio mental y una predisposición más favorable al trabajo.

Por otro lado, el segundo paso es no utilizar la cama como el lugar de trabajo, por un motivo similar: la predisposición mental. La cama es un espacio pensado para el descanso y/o el placer, por lo que no es recomendable convertirlo en un lugar que requiere una amplia concentración e incluso estrés, ya que puede provocar un efecto rebote afectando al sueño.

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Espacio adecuado

En este sentido, lo más importante es, en la medida de lo posible, diseñar un espacio dedicado al trabajo y, si es posible, que no sea en el propio dormitorio. Para ello hay que tener en cuenta varios aspectos, como el uso de una iluminación correcta para no forzar la vista y evitar dolores de cabeza.

La ventaja del teletrabajo es que puede darse tanto en el hogar como en un espacio de coworking, una terraza, una cafetería, un hotel o un aeropuerto. En cualquier caso, es importante contar con un escritorio para apoyar el ordenador a una altura adecuada y una silla cómoda para cuidar lo máximo posible la postura.

En caso de que el lugar elegido sea el hogar, es mejor optar por sillas ergonómicas pensadas para el trabajo que permiten ajustarse para una posición cómoda, con reposacabezas abatible para apoyar la cabeza, lo cual aliviará los músculos del cuello, reposabrazos para mejorar un mayor bienestar y un asiento suave a la vez que firme para mantener una posición correcta y que no fuerce la musculatura y huesos de los glúteos.

Otro aspecto importante es que el espacio no sea muy ruidoso ya que esto puede afectar a la concentración (aunque en estos casos depende mucho de cada persona).

Conectividad, comodidad y otras recomendaciones

Si bien puede parecer una cuestión clara, es fundamental contar con una conectividad de calidad, estable y con la suficiente velocidad, aspecto que estará determinado por el trabajo de cada uno: no será lo mismo la conectividad que requiera una profesional que sube contenidos a la red, que el de un programador, un contable, un periodista o un consultor, por ejemplo. En caso de que la conexión vía WiFi no sea suficiente, se puede optar por una conexión vía cable ethernet, que ofrecerá un mejor rendimiento y una experiencia de mayor calidad.

Asimismo, el uso durante muchas horas de un ordenador puede afectar a la salud, tanto de los ojos, por lo que es aconsejable emplear protectores de luz azul que se pueden instalar directamente sobre la pantalla/monitor o incluso en el caso de utilizar gafas, adquirir modelos que lo lleven puesto automáticamente en el cristal. Además, los oculistas recomiendan hacer descansos de la vista cada 30-45 minutos, apartando la vista de cualquier pantalla durante 1-2 minutos.

Pero también afecta a la espalda, la columna vertebral y el cuello, por lo que es importante plantearse la adquisición de un soporte para el monitor, ya sea individual o para dos pantallas, que permita tener una estación de trabajo ergonómica para reducir la tensión del cuello, ojos y espalda. Al elevar la pantalla a la altura de los ojos, permite colocar la espalda en ángulo recto con los pies en el suelo o incluso en un reposapiés ergonómico que mejore la postura.

Durante el teletrabajo, al igual que en una oficina, se emplea una gran cantidad de archivos, tanto digitales como físicos, por lo que es importante contar con las herramientas adecuadas para almacenarlos. En el caso de los documentos digitales se puede optar por soluciones en la nube, como Google Drive, Dropbox, iCloud de Apple o la solución que emplee cada compañía dependiente del equipo de IT. En el caso de los documentos físicos, una cajonera con ruedas permite su uso como archivador para los documentos, especialmente si cuenta con diferentes cajones que separen los documentos y utensilios del día a día, pero también como mesilla de noche y mesa auxiliar al mismo tiempo.

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