www.zonamovilidad.es

Contenido patrocinado

**escena realista** de email certificado para empresas
**escena realista** de email certificado para empresas (Foto: DALL·E ai art)

Cómo garantizar la validez legal de las comunicaciones mediante email certificado

Por Firma invitada
x
infozonamovilidades/4/4/18
domingo 01 de junio de 2025, 23:07h

Escucha la noticia

En el mundo empresarial, cada correo electrónico puede tener más peso del que pensamos. Un contrato enviado, una notificación laboral, un presupuesto aceptado… Son gestos cotidianos, casi automáticos. Pero, ¿y si necesitas demostrar que ese correo llegó? ¿O qué decía exactamente? Aquí es donde entra en juego el email certificado para empresas, una herramienta tan sencilla como poderosa, que muchas compañías todavía no utilizan… y que puede marcar la diferencia.

¿Qué es exactamente un email certificado?

Imagina un correo electrónico que deja constancia, verificable, de todo: quién lo envió, a qué hora, qué decía, si se entregó correctamente, si se abrió. Pues eso es un email certificado: un mensaje con trazabilidad completa y validez legal.

A diferencia del email tradicional, que se basa en la buena fe y la confianza (y que, seamos sinceros, cualquiera puede negar haber recibido), el correo certificado se convierte en una prueba digital sólida. Y en ciertos contextos, eso es oro.

¿Y cómo funciona?

El proceso es muy sencillo: utilizas una plataforma autorizada para enviar el correo. Esa plataforma certifica tanto el contenido como el envío y la entrega. Algunos sistemas también registran si el destinatario ha abierto el mensaje. Toda esta información queda registrada con sello de tiempo y firma digital, y se puede presentar ante un tribunal si hace falta.

Más que una formalidad: ¿por qué usarlo?

Podría parecer que esto es solo útil para abogados o grandes empresas… pero no. En realidad, cualquier empresa, por pequeña que sea, puede beneficiarse de usar email certificado para empresas en situaciones clave. Por ejemplo:

Al notificar sanciones o despidos.

Cuando envías presupuestos o contratos con compromiso.

Para cumplir plazos legales en trámites administrativos.

O simplemente, cuando necesitas dejar constancia real de lo que has dicho y cuándo lo has dicho.

No se trata de certificar cada email, sino de tener esta opción cuando realmente lo necesitas.

¿Tiene el mismo valor legal que un burofax?

Es una de las preguntas más comunes, y la respuesta es: sí, siempre que se utilice un proveedor homologado que cumpla con los requisitos legales establecidos en la normativa española y europea, como el Reglamento eIDAS y que además recoja la misma cantidad de evidencias que un burofax.

De hecho, el Tribunal Supremo ya ha reconocido su validez como medio de prueba, siempre que se acredite la integridad del mensaje y la trazabilidad del envío.

Eso sí, no vale cualquier servicio que diga “acuse de recibo”. Aquí entra en juego la elección del proveedor.

No todos los emails certificados son iguales

Uno de los errores más frecuentes es pensar que basta con marcar la opción “solicitar confirmación de lectura” en tu correo habitual. Pero no. Eso no tiene ningún valor legal por sí solo.

¿Qué debe ofrecer un proveedor serio de email certificado?

Registro del envío, recepción y apertura.

Certificación del contenido exacto del mensaje.

Firma digital y sello de tiempo.

Cumplimiento del Reglamento eIDAS.

Inscripción como Prestador Cualificado de Servicios Electrónicos de Confianza (PSC).

Cómo implementar el email certificado sin complicarte la vida

La buena noticia es que no necesitas cambiar mucho tu forma de trabajar ni instalar sistemas complejos. Hay paneles web sencillos desde los que puedes gestionar tus envíos más importantes.

Pasos básicos para empezar:

Elige un proveedor de servicio: preferiblemente cualificado .

Crea una cuenta para tu empresa.

Configura los usuarios y dominios autorizados.

Forma a tu equipo: ¿cuándo hay que usarlo? ¿cómo se envía?

Documenta los casos en los que es obligatorio o recomendable utilizarlo.

Y lo mejor es que puedes hacerlo de forma progresiva, empezando por los departamentos que más lo necesitan (como Recursos Humanos, Administración o Jurídico).

Casos reales donde marca la diferencia

Imagina que una empresa notifica a un trabajador la finalización de su contrato. Si lo hace por email normal, el empleado puede decir que no lo recibió. Pero si lo hace con un correo certificado, la empresa puede demostrar el envío, la recepción e incluso la apertura del mensaje. Y eso cambia por completo el escenario legal.

Otro caso frecuente: un proveedor incumple un acuerdo. Si tienes la comunicación certificada donde aceptaba las condiciones, tienes una prueba clara y sólida ante cualquier reclamación.

¿Cuándo es indispensable?

Aunque su uso puede extenderse a muchos contextos, hay algunos casos donde usar un email certificado debería ser norma, no excepción:

Situaciones en las que no deberías prescindir

Comunicaciones laborales sensibles.

Notificaciones legales a clientes o proveedores.

Envío de contratos, condiciones o presupuestos.

Contestaciones a requerimientos judiciales.

Cualquier comunicación con plazos legales estrictos.

Protege tus comunicaciones con un solo clic consciente

Estamos tan acostumbrados a enviar correos que a veces olvidamos lo importante que puede ser uno solo. Y lo vulnerable que es si no puedes demostrar que lo enviaste, lo entregaste o lo leyeron.

El email certificado no es sólo tecnología: es protección legal y tranquilidad. Y no cuesta tanto como piensas. Es, simplemente, una herramienta para empresas que quieren hacer las cosas bien.

Así que la próxima vez que vayas a enviar un correo importante… piensa: ¿y si este mensaje necesitara demostrar su existencia algún día?

Mejor prevenir, ¿no?

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios