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Las líneas del tren entre el Río Guadalquivir y Almodóvar
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Las líneas del tren entre el Río Guadalquivir y Almodóvar

La falacia de emprender en España: nada más allá de un 'do it yourself'

Por Pilar Bernat
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pbernattelycom4com /7/7/16
miércoles 22 de agosto de 2018, 20:13h

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Su nombre es José y trabajaba en el mundo de las telecomunicaciones como instalador. Un hombre con inquietudes que sentía mucha curiosidad por la electrónica, su especialidad, y por la energía solar

José, como tantos, se creyó lo de emprender y decidió construir con sus manos un barco ecológico alimentando por energía solar. El barco, que funciona bajo la denominación 'Barco turístico solar', en el Pantano de la Breña, Almodóvar del Río, Córdoba, se llena cada día para que el público disfrute de un centro de ocio acuático casi desconocido y una de las puestas de sol más increíbles que se pueden ver en la Península. Respetuoso con el medio ambiente, propulsado por energía solar, con WiFi a bordo, promotor turístico de la llamada playa de Córdoba, era lógico pensar que este hombre de mediana edad, gestor de sus propias redes sociales (ahora lo llaman community manager), habría recibido alguna ayuda: igual el euro y medio que corresponde a cada PyME española para que "se actualicen en términos tecnológicos" -según lo recientemente anunciado por el nuevo Gobierno de Sánchez-; tal vez una partida de la Junta de Andalucía, tierra de subvenciones regaladas, aunque fuera para comprar materiales; o, quizá, tuvo suerte y pudo acceder a alguna ayuda europea. Pero no, José es el prototipo del emprendedor español: 'Do it yourself' y luego ya, si eso, te apañas. Sólo alguna promesa aún no cumplida

Barco turístico solar. Pantano de la Breña

Y ¿cómo ha salido adelante? Con la palmadita en la espalda diaria y un claro sentido del co-working de su compañero de pantalán: Alex, otro emprendedor a la española que se dedica al deporte multiaventura sobre el agua (con mucho acierto) y de la mujer de éste, Arancha, propietaria de Al-Mudawar, una de las casas de Turismo Rural con no sólo una de las mejores relaciones calidad precio de la provincia de Córdoba, sino con un sentido de la hostelería que envidiarían muchos grandes -cree que el éxito reside en el pilar del hotel rural: que los huéspedes se sientan como en su casa-. Por supuesto, magnífica conexión inalámbrica de uso 'gratuito', página web perfectamente posicionada, oferta a través de empresas de reserva en línea y redes sociales, de nuevo sorprendentemente gestionadas. A ninguno de los dos les ha tocado, tampoco, la varita de las ayudas para introducir nuevas tecnologías en sus empresas, sólo algo de los fondos de desarrollo europeos.

Eso es emprender en España: prepararte para luchar contra la adversidad, la mala gestión, la corrupción e incluso el absurdo

Ahora Alex ha emprendido una nueva aventura, la gestión de campamentos escolares y empresariales (team building) en un centro de nueva creación, tan sencillo como impecable y de buen gusto, donde al inglés, el deporte, las manualidades o las actividades acuáticas se une, desde este año, la robótica. Y es que Alvaro Cavestany, fundador de 3DCanic ha llegado hasta Almodóvar para afrontar un nuevo sueño, ya que "una vez finalizan las becas, los proyectos digitales se quedan sin respaldo y hay que tomar medidas, buscar nuevos horizontes".

Ahora Alex ha emprendido una nueva aventura, la gestión de campamentos escolares y empresariales (team building) en un centro de nueva creación, tan sencillo como impecable y de buen gusto

La start up, un sueño imposible

Poco antes de las vacaciones veraniegas y de toparnos con tanto 'spanish entrepeneur' (currantes que abren su negocio, como se hizo siempre), ya habíamos recibido quejas de algunas 'start ups de envergadura' que luchan en Madrid: "emprender en España es un camino al calvario, alguien debería denunciarlo. Las multinacionales que presumen de dar ayudas, lo que hacen es gestionar los fondos que les transmite la SEPI para canalizarlos y entre los supuestos 'business angels' (inversores) hay mucha gente sin escrúpulos que sólo busca el beneficio propio a costa de tu trabajo; también tienes los que amablemente te ofrecen colaborar o lo que es igual, tú les haces el trabajo que ellos no saben hacer y te dejan aparecer en la nota de prensa o te dan una silla y una mesa para que -en los ratos que te quedan libres- intentes sacar adelante lo tuyo".

Castillo de Almodóvar del Río

Con los bancos rescatados hemos topado

Así es que en un país donde el tejido empresarial lo constituyen las pequeñas y medianas empresas, no hay organismo, institución, empresa o departamento administrativo que 'ponga una barca' para cruzar a la otra orilla y que, al menos, si remas sin parar, tengas la opción de no hundirte en un mar de impuestos.

Si somos sinceros, en contra de lo que ocurre en otros lugares del mundo, abrir un negocio en España, en castellano castizo, es recurrir al dinero familiar o de los amigos (fools, friends and family dicen los americanos); ya que, si no vas muy avalado, con los bancos tampoco se puede contar. Bueno sí, "para que el director de oficina se ponga estupendo y te amenace con no darte facilidades si no le generas negocio a través de pólizas de seguros, planes de pensiones, etc. (vivido en La Caixa)", o te den una vez tras otra con la puerta en las narices. Por no haber, no hay ni un centro de asesoramiento empresarial, un lugar de encuentro oficial en condiciones".

Que pare el tren, ya

¿Algún rayo de esperanza? Tenemos que volver a Almodóvar para encontrar una alcaldesa peleona, María Sierra Luque, que vela por su gente y que exige que en un municipio que vive del turismo, donde hay gente que arriesga y renuncia al PER para emprender, que tiene iniciativa y que sólo espera afluencia de clientes; donde muchos jóvenes viven y salen cada mañana a trabajar a Córdoba (20 minutos en coche) en unos autobuses sin servicio a la hora de entrar al trabajo ni regularidad alguna; donde se registra la mayor densidad de líneas férreas de Andalucía y donde la estación sólo espera una capa de pintura y que se encienda la luz… pare el tren. Sí, sí, que pare el tren.

Albergue para grupos de colegios y programas de equipo empresariales

QUE PARE EL TREN YA. Almodóvar registra la mayor densidad de líneas férreas de Andalucía y la estación sólo espera una orden para que pare el tren; pero no el AVE sino cercanías

Pero no el tren de las ayudas, ni el de las subvenciones, ni tan siquiera el de los inversores (que no estaría mal); tampoco, el AVE que recorre el municipio de punta a punta cada minuto, no… Que pare el tren; el tren de cercanías.

A Sierra le hablan de 'smart city', de intereses políticos, le mandan una impresora 3D sin finalidad alguna, le exigen compromiso, pero lo que necesita es tan fácil como garantizar la movilidad: de su gente, de los clientes de estos, de sus potenciales nuevos habitantes, de los turistas que traen riqueza, de los mayores y los enfermos que tienen que ir a un hospital, de los niños que deben acceder a mejores recursos educativos, de los inversores que vean en el pueblo una oportunidad. No se requiere dinero, tan sólo una orden de un jefe de RENFE para que pare el tren.

Atardecer en el Pantano de La Breña

En definitiva, eso es emprender en España: prepararte para luchar contra la adversidad, la corrupción, la mala gestión e incluso el absurdo. No es trabajar y esperar a que pase el tren, es ponerte de rodillas en una vía para que pare, puedas subirte y que siga su camino con o sin ti. Eso depende de tu capacidad de trabajo y la suerte que hayas tenido bajo el viejo principio de 'do it yourself' o dicho de forma más castiza, allá te las compongas.

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