Mayor crecimiento, transformación y liderazgo tecnológico, además de fortaleza financiera en un ejercicio, el de 2017, condicionado por la presión regulatoria son conceptos que resumen los resultados que han presentado el presidente de Telefónica, José María Álvarez Pallete, su Consejero Delegado, Angel Vilá y la directora general de Finanzas y Control, Laura Abasolo en la sede central de Telefónica en Las Tablas. Los ingresos de 2017 ascendieron a 52 mil millones de euros
A pesar de haber aumentado los ingresos en un 3,4%, el OIBDA un 5,3%, el beneficio neto un 32,2%, conseguir un flujo de caja de 4.947 Millones o reducir la deuda en 4.365 Millones de euros en el último año, José María Alvarez Pallete mantiene su postura de denuncia con respecto a la presión regulatoria a la que están sometidos los operadores, mientras otras empresas multinacionales de Internet disfrutan de un paraíso normativo, y recuerda que sólo exigen que “a un mismo servicio, se apliquen las mismas reglas, se mantengan las mismas obligaciones y se apliquen las mismas regulaciones”. “No queremos que regulen a otro -apostilló el Presidente-, sino que nos desregulen a nosotros porque algunas definiciones no están teniendo en cuanta el marco de los nuevos servicios digitales; por tanto, lo que me gustaría es realizar una enmienda a la totalidad de la regulación actual”.
Mismo servicio, mismas reglas, mismos derechos, mismas obligaciones
Como ejemplo de la incompresible situación que se vive a este respecto, mencionó Pallete la GDPR y la calificó de “algo bueno”. Sin embargo, recordó que en el trayecto que va del borrador inicial a la aplicación final “se ha diluído el esfuerzo”. Y lo mismo ocurre con otros temas básicos como el de las políticas de privacidad, dijo, “es el propio ciudadano el que está empezando a pedir productos y servicios en este ámbito, por tanto, va a ser la presión ciudadana la que va a empujar el debate y las decisiones que se adopten en términos de seguridad y privacidad y desde Telefónica estamos dispuestos a colaborar”.
Recordó el directivo que en España un marco regulatorio adecuado y flexible ha permitido el despliegue de fibra, ha fomentado la inversión y ha puesto nuestro país a la cabeza de Europa en esta tecnología: “Lo vemos como una oportunidad; pero repito: mismo servicio, mismas reglas, mismos derechos, mismas obligaciones y prefiero no ahondar en el tema porque corro el riesgo de encenderme -afrirmó contrariado-”.
“Hemos cumplido los compromisos”
Y si no quería “encenderse” es porque había convocado a la prensa para explicar que Telefónica había “cumplido los compromisos adquiridos en cuanto a crecimiento, EBITDA, y CAPEX sobre ingresos; pero que ese cumplimiento no había sido fácil”. De hecho, consideran que deben explicar a unos accionistas que no reaccionan ante los resultados obtenidos, que el negocio ha cambiado radicalmente y que, si antes con líneas de cobre la voz era el eje del negocio y los datos un subproducto, hoy ocurre justo lo contrario; ya que con fibra, los datos son la fuente de ingresos y la voz un subproducto.
Además, Telefónica ha construido una empresa sólida en base a plataformas donde es importante la digitalización de punta a punta, la integración y el apalancamiento de nuevas tecnologías que hacen que todo sea más sencillo y con un nivel de eficiencia superior; en dichas plataformas se ha realizado una inversión de 56.000 millones de euros: 45.000 en los activos físicos; 8.000 en tecnologías de la información y sistemas; 2.000 en productos y servicios. Ahora se está desarrollando el poder cognitivo. La inversión en 2017 ha sido de 8.700 millones de euros.
“Creemos que tenemos una enorme oportunidad porque la explosión de tecnología nos permite tener un producto que la gente adora: la conectividad -explicó Álvarez Pallete-. El impacto de la digitalización es un motor de progreso y de bienestar y nosotros queremos estar en mercados donde podamos ser líderes y gestionar el capital para invertirlo allá donde pueda ser más efectivo”.
Tal vez el hecho más destacado de los resultados es la reducción de una inmensa deuda que suponía una rémora para la compañía. Esa reducción de la deuda en 8.000 millones de euros, que se ha llevado a cabo en 18 meses, ha venido impulsada por una fuerte generación de caja, un rating de grado de inversión sólolido y el desapalancamiento.
Elige todo
Con respecto a las prioridades estratégicas, Telefónica ha marcado tres para prensa, analistas y accionistas: Ofrecer a las personas el poder de la conectividad, estar presentes en mercados donde tener impacto y crear valor y optimizar las capacidade para conseguir un futuro digital sostenible; todo ello en base a sólidos resultados financieros y retribución adecuada al accionista. “Queremos ser creíbles -reiteró-; de ahí la importancia de los procesos y de los sólidos resultados financieros que hoy presentamos. Buscamos la mejor experiencia de cliente, aplicamos inteligencia cognitiva y se procurará confianza, seguridad y privacidad -concluyó el presidente de Telefónica”.
Los datos, el maná
"El incremento del tráfico de datos es resultado del esfuerzo en infraestructuras con redes de última generación que se ha realizado. 450 siglos en horas de video de alta definición equivalen a los datos que se han transmitido en el mundo sólo en 2017. En móvil ocurre lo mismo y con la llegada de la inteligencia artificial el crecimiento seguirá siendo exponencial".