Prueba Alcatel Mandarina Duck Moon: Glamour móvil

Alcatel se ha unido a ese elenco de firmas de telefonía móvil que ha decidido unir sus fuerzas con otra marca para dotarse de todo el glamour posible. Es el caso del Alcatel Mandarina Duck, un teléfono orientado a las mujeres o a aquellos usuarios que le dan prioridad al diseño. Elaborado en nácar y en formato concha, la carcasa luce un vistoso diseño en líneas curvas y su pantalla externa -que en modo espera se convierte en un espejo- recuerda la cabeza de un pato si se mira el teléfono horizontalmente, donde el ojo del ave vendría a ser el objetivo de la cámara de fotos. Y para que quede claro que este equipo ha nacido bajo el ala de Mandarina Duck, en la parte trasera luce el logotipo y la leyenda de la firma. Otro detalle digno de mención es su teclado interno, que ha sido desarrollado también sobre un espejo en el que el usuario puede mirarse cuando, por ejemplo, escribe un SMS. Reproducción de vídeo y música No es precisamente un equipo que venga a colmar las expectativas de quienes dan prioridad al uso de las funciones multimedia porque, como ya hemos dicho, su público es aquél que desea disfrutar de un teléfono distinto en el apartado del diseño. Es cierto que cuenta con un reproductor de archivos en formato MP4 (reproduce música y películas), pero su cámara de fotos sólo atesora una calidad de 0,3 megapíxeles (640x480). Para almacenar los archivos de audio y foto cuenta con una memoria integrada de 10MB, aunque viene de serie con una tarjeta de tipo microSD con 1GB de capacidad. El acceso a la misma se encuentra escondido cerca de la bisagra que articula la tapa del terminal. Para extraer/introducir la tarjeta hay que levantar una pequeña tapa de plástico que es exactamente igual a la que recubre el acceso al puerto USB-cargador, ubicada en el otro extremo de la bisagra. Estas son las dos únicas conexiones del teléfono, ya que los auriculares, que vienen de serie, se conectan también vía USB. El menú musical permite buscar pistas por álbum, artista, género, las recién escuchadas o aquellas que más gusten al usuario, para lo cual en este último caso deberá haberlas almacenado previamente. Es posible ecualizar el sonido dando preferencia a los bajos o agudos, y dispone también de varias ecualizaciones preestablecidas en función de la música que se esté escuchando: pop, rock, clásico, baile... aquellos que no deseen someterse a la dictadura de los cables pueden utilizar auriculares con tecnología Bluetooth, protocolo con el que, además, el Mandarina Duck es capaz de intercambiar archivos con otros dispositivos. Dos juegos de serie incluidos La pantalla interna guarda una modesta calidad de 128x160 píxeles y un tamaño de 2,6x3 centímetros que no impiden disfrutar cómodamente de los dos juegos con los que viene de serie. HeliMinator y el Rocket Advanture. El punto fuerte del equipo es -además del diseño-, la autonomía. Cuenta con 300 horas en modo conversación y hasta 7 en modo espera. Tiempos que pueden variar en función de factores como la utilización del reproductor MP3 o los juegos, y de lo lejos o cerca que el usuario se encuentre de la antena de telefonía que suministre la cobertura. Organizador, alarma, calculadora, conversor de moneda o grabadora de voz son algunas otras aplicaciones con las que viene este teléfono, sin grandes alardes en el terreno multimedia pero con un toque fashion que hará las delicias de muchos.