El fabricante sueco de redes y equipos de telecomunicaciones Ericsson ha logrado mejorar con creces sus cifras en los primeros nueve meses del año, con unos datos que sitúan en cifras verdes a la firma ya que en el mismo periodo de 2019 registró pérdidas de 2.207 millones de coronas (213 millones de euros).
Ericsson ha reconocido que “la COVID-19 ha tenido hasta ahora un impacto limitado en nuestro negocio, pero estamos vigilando de cerca cualquier signo de cambio en la situación”, lo que ha permitido a la compañía acumular un beneficio de 10.400 millones de coronas suecas (unos 1.005 millones de euros).
Todo esto se traduce en un beneficio neto de 5.600 millones de coronas suecas (541 millones de euros) en el tercer trimestre, un 115% superior al registrado en el segundo trimestre, cuando Ericsson obtuvo 2.585 millones de coronas (153 millones de euros).
"Los resultados hasta la fecha fortalecen nuestra confianza en el cumplimiento del objetivo para 2020"
Respecto a los datos de las ventas netas, las cifras ascienden a 57.500 millones de coronas (5.569 millones de euros), lo que supone un 1% más interanual.
“Seguimos siendo positivos sobre las perspectivas a largo plazo para la industria y Ericsson. Los resultados hasta la fecha fortalecen nuestra confianza en el cumplimiento del objetivo para 2020”, explica Ekholm.
Según explica Börje Ekholm, presidente de Ericsson, estos resultados se deben al incremento de los márgenes de beneficio en todas sus actividades y a la aportación del desarrollo de la 5G en China, y es que según las cifras que aporta la entidad, las ventas en China han contribuido a un incremento del 7% interanual tras el ajuste en divisas comparadas.
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