El Gobierno quiere convertir a España en un país líder en la producción audiovisual con el objetivo de aumentar un 30% la producción audiovisual realizada en nuestro país entre 2021 y 2025 para “construir un ecosistema sostenible, más rico y fructífero que posibilite el crecimiento que merece el inmenso talento que alberga nuestra industria”, ha señalado Sánchez quien ha asegurado que “la industria audiovisual es clave por su peso en el empleo y en la economía, pero también por su peso en nuestras identidades culturales y en nuestra proyección internacional”.
Impulsar la cadena de valor
Uno de los objetivos del plan es impulsar de manera significativa toda la cadena de valor de la industria audiovisual a partir de las fortalezas de nuestro país, como “una industria audiovisual solvente, profesionales bien formados y de prestigio, una capacidad creativa reconocida mundialmente y una ventaja comparativa en el mercado global creciente de producción audiovisual en español”.
Las medidas se dividen en cuatro ejes basados en tres prioridades: convertir España en polo de atracción de la producción audiovisual, reduciendo los costes administrativos y regulatorios; mejorar la competitividad de las empresas mediante las nuevas tecnologías que permiten competir en un mercado digitalizado; y generar talento reduciendo la brecha de género.
Digitalización e internacionalización
El primer eje cuenta con una inversión de 240 millones de euros e incluye acciones para digitalizar la producción audiovisual y el seguimiento de audiencias, para impulsar la puesta en marcha y mejora de plataformas dedicadas a la producción audiovisual española y su distribución para favorecer su comercialización internacional, especialmente la de los proyectos que generen ecosistemas de colaboración entre pymes.
Asimismo, se creará el Spain Audiovisual Hub Bureu, un punto único de información, asistencia y acompañamiento a potenciales inversores en el sector, tanto a las empresas extranjeras como a las españolas interesadas en la internacionalización de su actividad.
Instrumentos financieros y fiscales
El segundo punto se centra en las medidas orientadas a facilitar el acceso a la financiación y a la aplicación de incentivos fiscales para la producción audiovisual en España, el eje que más inversiones contará al recibir 1.330 millones de euros hasta 2025.
De este modo se ampliarán el tipo de proyectos susceptibles de recibir financiación del ICO y los proyectos que podrán ser financiados por ENISA.
Además, el marco fiscal española para estas actividades se modificó el año pasado, introduciendo medidas para facilitar su aplicación y seguimiento, dotándolas de mayor certidumbre y predictibilidad para los inversores. También se incluyen facilidades de acceso a la financiación bancaria y refuerzo de los instrumentos financieros de apoyo a la internacionalización.
Talento
El tercer punto busca adecuar, con 15 millones de euros de inversión, los planes de formación a las competencias demandas para la industria y apoyar la formación que las propias empresas ofrecen a sus trabajadores y se proporcionará apoyo institucional a la realización y difusión de programas de formación que pongan en marcha las empresas del sector audiovisual.
Reforma regulatoria
El cuarto eje contará con un presupuesto de 18 millones y tiene que ver con reformas tendentes a mejorar la regulación y eliminar barreras administrativas a través de la renovación de la Ley General de Comunicación Audiovisual y de la Ley del Cine con el objetivo de simplificar y reducir las cargas administrativas del sistema de inmigración por razones de interés económico y la creación de una ventanilla digital para los visados de residencia y trabajo relacionados con los proyectos audiovisuales.
Por otro lado, el Gobierno se compromete a realizar un informe del sector audiovisual cada año en el que se recoja una descripción de los distintos subsectores, su evolución y sus perspectivas de crecimiento.
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