Una investigación llevada a cabo por The Markup señala que estos hospitales han utilizado en sus páginas web ‘Meta Pixel’, un rastreador con el que es posible tener acceso a cualquier información de los pacientes. Si se profundiza en la información con la que se puede hacer esta herramienta, destacan, el nombre de las personas enfermas, la hora de las citas, el nombre del médico o los medicamentos con los que tienen reacciones alérgicas. En líneas generales, Meta Pixel tiene acceso a datos “sensibles” y privados, como las enfermedades diagnosticadas, entre otros, ya mencionados anteriormente.
El 33% de los hospitales más frecuentados en Estados Unidos estaban usando Meta Pixel en sus páginas web
Siguiendo esta línea, la herramienta de Meta puede proporcionar información a las redes sociales de la compañía, Instagram y Facebook para implantar anuncios personalizados. Un dato bastante alarmante es que el 33% de los hospitales más frecuentados en Estados Unidos estaban usando Meta Pixel en sus páginas web. Esto supone infringir la regulación de privacidad HIPAA.
Meta se enfrenta a dos demandas
Ante este panorama, la gigante de redes sociales tiene que lidiar con dos demandas colectivas que alegan que Meta ha infringido esta normativa y la Ley de Invasión de la Privacidad de California al hacerse con los datos de pacientes sin su permiso.
Si se profundiza en las demandas, la primera se presentó a finales de julio. Varias personas afectadas demandaron a Meta, al Centro Médico UCSF y a la Fundación Médica Dignity Health. En este contexto, Bleeping Computer reveló que esta monitorización de la información confidencial iba más allá del inicio de sesión, se centraba en las plataformas en las que los pacientes ingresaban sus fatos para acceder a su información personal como recetas o análisis clínicos.
Los afectados identificaron la violación de su privacidad cuando comenzaron a visualizar anuncios personalizados en Facebook, además, estos anuncios se adaptaban a sus situaciones médicas.
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En este documento se culpa a la red social y a los proveedores de atención médica de tener constancia de que estaban realizando una actividad ilegal recaudando datos personales. Aunque las compañías se mantuvieron al tanto de estos avisos, continuaron ejecutando esta herramienta de rastreo.
Paralelamente, en la segunda demanda colectiva se denuncia a los proveedores de atención médica, como hospitales y centros de salud (alrededor de 664), por compartir información médica con Facebook, utilizando Meta Pixel.
Finalmente, un juez tendrá que certificar estas demandas como acciones colectivas antes de que se pueda seguir con este proceso y obtener el estado de demanda colectiva. Si esta tarea resulta un éxito, Meta tendrá que afrontar un coste bastante alto.
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