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Una ilustración de Elon Musk junto al logotipo de Twitter
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Una ilustración de Elon Musk junto al logotipo de Twitter

Musk controla Twitter, pero ¿quién controla a Musk?

Por Alfonso de Castañeda
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alfondcctelycom4com/8/8/17
lunes 19 de diciembre de 2022, 10:00h

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El multimillonario Elon Musk compró, tras varias dimes y diretes, la red social Twitter por 48.000 millones de dólares, una de las operaciones más grandes de la historia del sector tecnológico (por encima de WhatsApp, Instagram YouTube, Skype…). Desde entonces, todo ha sido un "obedece al millonario", pero el dinero no puede con todo. O, por lo menos, no debe poder.

Yo siempre he sido defensor de que cada uno hace en su casa lo que le da la gana, y sigo siéndolo. Pero hay muchas veces que la casa es alquilada, por lo que hay cosas que no se pueden hacer.

En el caso de Twitter, el control está en manos de Elon Musk, un excéntrico millonario estadounidense que, con la excusa de querer recuperar la libertad de expresión se le metió en la cabeza querer comprar Twitter

Las empresas, salvo que sea un negocio familiar donde solo trabaja la familia, es un poco como las casas alquiladas. ¿Puedes hacer lo que quieras? Pues depende de las acciones que tengas y el poder que poseas dentro. En el caso de Twitter, el control está en manos de Elon Musk, un excéntrico (como casi todos) millonario estadounidense que, con la excusa de querer recuperar la libertad de expresión se le metió en la cabeza querer comprar Twitter, una red social abierta en marzo de 2006 por Jack Dorsey y sus socios con más de 368 millones de usuarios únicos mensuales.

Sin embargo, nada más lejos de la realidad: Musk ha optado por abrazar la censura de aquellos que le critican (o le vigilan), de cargar contra la competencia (bloqueando, por ejemplo, la cuenta de Mastodon y de todas las cuentas que promocionen promuevan las plataformas de Facebook, Instagram y Mastodon, entre otros) y recuperando cuentas bloqueadas anteriormente que habían infringido las normas de la aplicación, como el caso del expresidente de Estados Unidos, Donald Trump y el del rapero Kanye West, entre otros.

Hasta ahí, todo puede ser comprensible: querer recuperar personalidades que mueven mucho tráfico, reducir la presencia de su competencia, y evitar críticas. El problema reside precisamente en el propio Musk y sus incongruencias.

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Bloqueo y desbloqueo a periodistas, ¿dónde está el derecho a la información?

Una de estas incongruencias está precisamente relacionada con el reciente bloqueo (y posterior desbloqueo) de periodistas en la red social. “Mi compromiso con la libertad de expresión se extiende incluso a no prohibir la cuenta que sigue a mi avión, aunque eso es un riesgo directo para la seguridad personal”, decía Musk a principios de noviembre.

Sin embargo, nada más lejos de la realidad. Esta semana, la red social del pajarito ha bloqueado la cuenta que hacía seguimiento del avión privado del magnate (con datos públicos), @ElonJet, asegurando que había puesto en peligro la vida de uno de sus hijos. La cuenta está actualmente suspendida.

Asimismo, se ha producido también el bloqueo temporal de varios periodistas tecnológicos de Estados Unidos a los que acusaba de haber infringido la nueva norma de la compañía sobre la revelación de la ubicación de las personas.

Un día después y tras dos encuestas públicas, ha reactivado las cuentas de varios periodistas que había vetado, aunque en algunos casos lo ha permitido con la condición de eliminar algunas publicaciones.

La cuestión en este caso vuelve a ser la que titula este artículo, ¿quién controla a Musk? De momento, nadie. A excepción de la presión que se hace desde los medios, aunque también ha recibido una amenaza directa desde la Unión Europea.

“La Ley de Servicios Digitales de la UE exige el respeto de la libertad de prensa y de los Derechos fundamentales"

"Las noticias sobre la suspensión arbitraria de estas cuentas en Twitter son preocupantes. La Ley de Servicios Digitales de la UE exige el respeto de la libertad de prensa y de los Derechos fundamentales", advierte la vicepresidenta de la Comisión Europea, Vera Jouvorá, en un mensaje difundido a través Twitter.

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¿Dónde queda el derecho a la competencia?

¿Te imaginas no poder descargarte WhatsApp de la App Store porque Apple ya tiene una app de mensajería? ¿O no poder comprar altavoces inteligentes en Amazon porque los estadounidenses ya venden los Echo? ¿O no poder buscar Bing.com en Google porque para eso está Google? Puede parecer absurdo y no tener ningún sentido que una empresa si quiera se plantee esto, que es radicalmente contrario a todo lo que aseguran las leyes de competencia de todo el mundo: Unión Europea y Estados Unidos incluidos.

Pues por absurdo que parezca, esto es precisamente lo que ha planteado Twitter ahora. En otro arrebato del multimillonario Elon Musk, la red social ha bloqueado las cuentas de otras redes sociales, como la de Mastodon (aunque posteriormente la ha vuelto a abrir, eliminando algunos tuits), y ahora ha confirmado que se van a prohibir las publicaciones que incluyan la promoción de otras redes sociales.

“Sabemos que muchos de nuestros usuarios están activos en otras plataformas de redes sociales. Sin embargo, ya no permitiremos la promoción gratuita de ciertas plataformas de redes sociales en Twitter”, advierte la compañía. “Específicamente, eliminaremos las cuentas creadas únicamente con el fin de promocionar otras plataformas sociales y contenido que contenga enlaces o nombres de usuario para las siguientes plataformas: Facebook, Instagram, Mastodon, Truth Social, Tribel, Nostr y Post”, matizan, aunque aseguran que seguirán permitiendo la publicación cruzada de contenido desde cualquier plataforma de redes sociales.

En este contexto, la pregunta está clara, ¿está Musk y Twitter poniendo en peligro la competencia? La respuesta no es sencilla porque habría que argumentar el perjuicio que genera esta decisión a las diferentes redes sociales y habría que demostrar también que Twitter goza de un dominio de mercado suficiente. Sin embargo, el caso está ahí y las acciones de Twitter bloqueando y advirtiendo de supuestas “amenazas” al intentar publicar links de Mastodon son una realidad.

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¿Y cuál es el futuro de Twitter?

Son muchas las dudas al respecto del futuro de la red social, incluso rumores hablan de un posible cierre, un aspecto cada vez más lejano después de que Musk haya podido reconducir ligeramente la gran caída de inversión publicitaria. En este sentido, un informe publicado por los analistas Insider Intelligence predice que Twitter sufrirá un éxodo importante de usuarios en los próximos dos años que, en todo el mundo, afectará a más de 32,7 millones de usuarios a finales de 2024.

Esto se debe, según el informe a los cambios fundamentales en la plataforma, los problemas técnicos y el contenido ofensivo que ahuyentará a los usuarios.

"El esquelético personal de Twitter, que trabaja las 24 horas del día, no podrá contrarrestar los problemas de infraestructura y moderación de contenidos de la plataforma"

"No habrá un acontecimiento catastrófico que acabe con Twitter. Por el contrario, los usuarios empezarán a abandonar la plataforma el año que viene a medida que se sientan frustrados por los problemas técnicos y la proliferación de contenidos odiosos o desagradables", advierte Jasmine Enberg, analista principal de Insider Intelligence. "El esquelético personal de Twitter, que trabaja las 24 horas del día, no podrá contrarrestar los problemas de infraestructura y moderación de contenidos de la plataforma", señala Enberg.

El tiempo dirá finalmente qué es de Twitter y de Elon Musk, que hace solo unas horas lanzaba una encuesta en su perfil preguntando al público si quería que siguiese siendo el CEO de la compañía o no con la pregunta: “¿debo renunciar como jefe de Twitter? Me atenderé a los resultado de esta encuesta”, encuesta que a la hora de publicación de esta columna sí pedía la dimisión de Musk.

El tiempo dirá finalmente qué es de Twitter y de Elon Musk. Yo lo que tengo claro es que la prensa debe seguir haciendo su trabajo: ser un contrapoder.

¡Vestager, te elijo a ti!

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