La denuncia de la situación llegó de parte de la ONG Labor Watch, quien ha advertido que cuenta con prevé que entre 50 y 100 de los empleados son menores de edad que realizan los mismos trabajos que los adultos.
Según el observatorio la empresa conocía que estaba empleando a menores de edad sin la supervisión de ningún representante, a tal punto que los mantenía en dormitorios alquilados fuera de los terrenos de la fábrica.
Samsung, el principal socio de la compañía, ha asegurado que en sus dos visitas en situ de la fábrica este año no encontró ninguna irregularidad. La fábrica no sólo viola la ley empleando a niños chinos, sino que también lo hace con adultos, a quienes hace trabajar 11 horas al día todos los días de la semana.