La Dirección de Competencia, CNMC, deduce indicios racionales para pensar que los acuerdos entre Telefónica y Yoigo son anticompetitivos y que, en consecuencia, podrían ser prohibidos. El proceso jurídico fue iniciado en el mes de Septiembre por Vodafone España a quien, posteriormente, se sumó Orange. A pesar de que no aparecen reflejadas en la nota emitida por el Regulador, la solicitud de medidas cautelares continua abierta y no se descarta que puedan adoptarse
Según explica la nota de la Comisión, "la Dirección de Competencia ha puesto en marcha este procedimiento ante la existencia de indicios racionales de prácticas prohibidas por el artículo 1 de la Ley 15/2007, de 3 de julio, de Defensa de la Competencia (LDC) y del artículo 101 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE). Del análisis de la información recabada, los acuerdos suscritos por Telefónica y Yoigo para el uso o despliegue compartido de redes de telefonía móvil, y la distribución comercial por parte de Yoigo de un producto convergente con sus servicios móviles y los servicios fijos de Telefónica, podrían constituir una restricción de la competencia prohibida por las leyes". "La incoación de este expediente -continúa- no prejuzga el resultado final de la investigación. Tras la comunicación de este expediente a las partes se inicia ahora un periodo máximo de 18 meses para la instrucción y resolución del expediente por la CNMC. Sobre estas cuestiones han presentado denuncias Vodafone España y France Telecom España (Orange)".
Reacciones
Desde la firma del acuerdo el pasado 1 de agosto, tanto Orange como Vodafone han realizado reiteradas denuncias públicas y judiciales y han solicitado unas medidas cautelares que, hasta el momento, el Organismo Regulador no parece haber contemplado. el presidente de Telefónica España, José María Gil Pérez, ha defendido siempre que "se trata de un acuerdo de roaming entre compañías, no muy diferente a otros existentes en el mercado, y no de una cesión de frecuencias que permite la puesta en marcha de un servicio nuevo".
Vodafone, ya en el mes de septiembre, durante la celebración del Encuentro de las Telecomunicaciones en la Universidad Menéndez Pelayo, anunció la denuncia interpuesta ante ante Competencia y el inicio de una batalla jurídica sobre la que el ministro de Industria manifestó que el "consideraba que cumplía el marco regulatorio" y en la que no se han querido pronunciar, hasta el momento, ni el secretario de Estado de Telecomunicaciones, ni la vicepresidenta de la Comisión Europea, Nelly Kroes, a quien también se le solicitó posicionarse hace unas semanas.
En palabras de Francisco Román, presidente de Vodafone España: “El acuerdo entre Telefónica y Yoigo supone el mayor grado de cooperación y coordinación entre rivales visto en España, discrimina a terceros y perjudica a la competencia en su conjunto”. Vodafone mantiene el frente abierto para conseguir que los acuerdos no sigan adelante en su forma actual. Insistiendo en la solicitud de adopción de medidas cautelares, realizando alegaciones y proponiendo y aportando pruebas de las conductas ilícitas denunciadas.
Por su parte, Orange asegura que "nos parece positivo que la CNMC haya decidido abrir expediente sancionador y que inicie una investigación profunda y detallada de lo que a nosotros nos parece claramente un conjunto de acuerdos que restringe el nivel de competencia del mercado. Es importante actuar con la mayor celeridad posible antes de que el efecto perjudicial de estos acuerdos se haga efectivo. Por eso seguimos considerando necesarias, relevantes y urgentes medidas cautelares".
La valoración de Yoigo no se ha hecho esperar: “Desde el principio, el acuerdo entre Yoigo y Telefónica se ha caracterizado por su total transparencia, tanto en la comercialización de la oferta mayorista por parte de Yoigo, como en la utilización de la red 4G de Yoigo por parte de Telefónica. Entendemos que ambas partes del acuerdo funcionan precisamente como impulso a la competencia tanto en el mercado fijo, en el que Yoigo no estaba presente, como en el mercado móvil, dando la posibilidad a Telefónica de incluir 4G en sus servicios móviles. Por parte de Yoigo, estamos abiertos a llegar a acuerdos para que otros operadores puedan utilizar nuestra red 4G, si así lo desean. Actuamos en un sector muy competitivo, en el que basta comprobar los balances de portabilidades entre operadores para apreciar la indiscutible competitividad entre las distintas compañías, también, por supuesto, entre Telefónica y Yoigo”.
El servicio 4G en el fondo de la cuestión
Detrás del acuerdo entre el operador sueco y el nacional existe un problema técnico de ocupación de las frecuencias de 2G y 4G y que les permite complementarse; ya que Yoigo no tiene red propia de 2G y Telefónica tiene sus 1.800 MHz (frecuencia sobre la que se está realizando el despliegue a falta de la liberación de los 800 MHz) absolutamente copada, lo cual lo condicionaba a tener que esperar a 2014 para poder realizar su lanzamiento.
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