El muerto al hoyo y el Exynos a los 'i products'

Así, aquellos que nos han dado materia para que los medios del mundo entero escribiéramos, durante años, sobre los muchos litigios que las compañías mantienen en EE.UU, Corea del Sur, Japón, Alemania, Italia, Holanda, Francia, Reino Unido y Australia, parecen haber abandonado las armas para volver a ser socios. Una de las razones, para la sorprendente noticia, podría ser pagar en especies parte de las multas mil millonarias que los jueces americanos habrían impuesto a Samsung; otra, que después de otros intentos, ningún fabricante le ha dado mayor rendimiento a los de Cupertino en términos calidad/precio.

Las relaciones entre Samsung y Apple se remontan a la fabricación del SoC (sistem on chip) denominado A4 para los americanos y Hummingbird para los asiáticos (posteriormente Exynos 4 single), con arquitectura ARM, desarrollado por los coreanos con una empresa de seminconductores de Austin (Texas) llamada Intrinsity; compañía que posteriormente compró Apple.

Desde el mismo momento en que salió el procesador a la calle, los californianos iniciaron un discurso en el que aseguraban "que le habían enseñado a Samsung a hacer procesadores y que su iniciativa se les había vuelto en contra porque los coreanos se habían aprovechado de ella". Cuatro años después, la historia se reescribe y, donde dije digo, digo Diego. A no ser que Reuters no haya contrastado la noticia y busque eco mundial, lo que la agencia de noticias gala, que no atraviesa su mejor momento, hace con asidiudad.

Apple asegura que ellos nunca comparten información sobre sus componentes; por tanto o es otra de las sorpresivas filtraciones del equipo que fuera de Jobs, tal vez realizada por alguien dolido porque el deseo de llevar el pleito más allá de la muerte que tenía el genio no se ha respetado, tal vez desde Seúl han querido gritar a los cuatro vientos que esos americanos tan presuntuosos se rindes a sus pies y a los de su I+D.

Me inclino por lo segundo. El muerto al hoyo y el vivo... ya se sabe.