Según IDC España, en 2023 una de cada dos organizaciones generará más del 40% de sus ingresos a partir de la venta de productos y servicios digitales. Bajo un escenario macroeconómico repleto de incógnitas y situaciones imprevistas, el CIO ve evolucionada su figura en las organizaciones modernas en su viaje hacia la transformación digital, ya que más del 56% tendrá responsabilidad de negocio digital el próximo año según ha confirmado la consultora ante más de 30 CIO de las grandes organizaciones reunidos en el CIO Summit 2022.
En el evento anual de referencia de los CIO, IDC ha dado un paso más desvelando que el 20% estos directivos ya están siendo evaluados por su capacidad de co-crear nuevos modelos de negocio e interaccionar con el ecosistema, mientras que un 37% lo estará en menos de 12 meses. Los principales retos para alcanzar los objetivos de resiliencia en materia de infraestructura digital que están demandando las empresas para seguir siendo competitivas son: el coste y la complejidad de dar soporte a múltiples generaciones de infraestructuras y aplicaciones a través de metal desnudo, máquinas virtuales, contenedores y nubes públicas, según ha confirmado José Antonio Cano, director de análisis y consultoría de IDC España.
“La adopción de una estrategia digital first es un imperativo de negocio. Los CIO deben abordar un proceso de transformación de modelo de TI con foco en la nube”, explica. Por ello, la condición necesaria para que las empresas sigan siendo competitivas en el futuro es una red centrada en las aplicaciones que entregue la experiencia de usuario adecuada.
En 2023 una de cada dos organizaciones generará más del 40% de sus ingresos a partir de la venta de productos y servicios digitales.
En la agenda de los CIO se impone la nube distribuida y conectada con el objetivo de aprovechar la analítica del dato como palanca para incrementar la productividad de las organizaciones y generar nuevos productos o servicios digitales.
La sostenibilidad ha emergido con fuerza a lo largo de 2022. De hecho, el 72% de las organizaciones españolas ya considera la sostenibilidad como una de las principales prioridades de negocio y el 40% de las organizaciones la habrá incorporado de manera completa en las operaciones para el año que viene. Tal y como se ha revelado en el IDC Summit 2022, se puede alcanzar un ahorro de hasta el 12% en el desarrollo de arquitecturas sostenibles que racionalicen, identifiquen y desacoplen las aplicaciones de alto consumo energético.
En el evento también se ha hecho hincapié en el futuro del trabajo. Según los datos que ha aportado IDC, este mercado alcanzará los 235.000 millones de dólares en 2024 en Europa, y un crecimiento del 18% respecto a este mismo año en España para el año que viene. Las empresas empiezan a reconocer que los modelos de trabajo híbridos serán ubicuos ante una cifra abrumadora, ya que se estima que en tres años el 42% de los empleados serán trabajadores híbridos.
“Así las cosas, gestionar la experiencia del empleado resultará clave para lograr incrementar el engagement del mismo con la organización, la productividad y combatir la fuga de talento”, continua José Antonio Cano de IDC España ante unos datos más que concluyentes: el 85% de las organizaciones considera que una mejor experiencia de los empleados y un mayor compromiso de estos se traduce en una mejor relación del empleado con la organización, una mayor satisfacción de estos y mayores ingresos para su organización.
No obstante, las organizaciones siguen luchando para consolidar el trabajo en equipo y la creación de una cultura de confianza en las organizaciones híbridas siendo el principal reto para las empresas (44%) lograr que los equipos trabajen unidos con eficacia según se ha mostrado a lo largo de este CIO Summit 2022.
Finalmente, el volumen y la variedad de las amenazas, así como la probabilidad de que se vean comprometidas, obliga a las empresas y por tanto a sus CIO a reconsiderar el enfoque. Según la última encuesta de IDC, el 90% de las empresas está abordando un cambio de estrategia de TI donde la ciberseguridad es una de las tres principales prioridades de inversión ante el exponencial incremento de las amenazas y que más del 70% del tiempo del equipo de ciberseguridad se dedica a administrar herramientas.
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