En el primer trimestre de 2025, España se ha posicionado como el quinto país del mundo más afectado por filtraciones de datos, con un alarmante total de 2,4 millones de cuentas comprometidas. Este incremento del 54,6% en comparación con el último trimestre de 2024 ha encendido las alarmas en el ámbito de la ciberseguridad, evidenciando un panorama preocupante para los usuarios españoles.
Desde 2004, el país ha acumulado un total de 248,1 millones de cuentas de usuario vulneradas, lo que se traduce en una media de 3,7 veces que cada dirección de correo electrónico ha sido expuesta a riesgos. En total, se han expuesto 737,6 millones de registros personales, lo que resalta la gravedad de la situación. Estas estadísticas revelan que, por cada correo electrónico comprometido, se filtran en promedio tres datos adicionales, lo que aumenta el riesgo de robo de identidad y otros delitos informáticos.
A pesar de que a nivel global se ha observado una notable disminución del 93% en el número de cuentas afectadas, pasando de 973,7 millones a 68,3 millones, España ha experimentado un fenómeno contrario. En este contexto, Luís Costa, Research Lead de Surfshark, advierte que, aunque el número de cuentas vulnerables en otras regiones ha disminuido, los usuarios deben mantenerse vigilantes. Las ciberamenazas continúan evolucionando, y los atacantes adaptan sus tácticas constantemente. Para mitigar estos riesgos, Costa recomienda adoptar prácticas de seguridad robustas, como actualizar regularmente las contraseñas y habilitar la autenticación de dos factores.
El análisis de Surfshark también destaca que, en el primer trimestre de 2025, se han vulnerado 18,8 cuentas por minuto en España, un incremento significativo que contrasta con la tendencia global. Este panorama se agrava aún más al considerar que el 60% de los usuarios afectados podría estar en riesgo de sufrir apropiación de cuentas, extorsión o delitos cibernéticos.
En el ámbito internacional, Estados Unidos lidera la lista de países con más cuentas filtradas, seguido de Rusia, India y Alemania. Sin embargo, España se destaca en términos de densidad de filtraciones, con 51 cuentas comprometidas por cada 1.000 residentes, lo que la coloca en una posición preocupante en el contexto europeo.
Con estos datos en la mano, queda claro que la ciberseguridad en España enfrenta desafíos significativos. La creciente cantidad de cuentas vulneradas subraya la necesidad urgente de que los usuarios adopten medidas proactivas para proteger su información personal y organizativa en un entorno digital cada vez más amenazante.