Según ha explicado Ylva Johansson, comisaria de Asuntos de Interior de la Unión Europea, en una entrevista con el diario alemán Welt am Sonntag, los proveedores de servicios de internet y las empresas de redes sociales reportaron en 2020 más de 22 millones de delitos relacionados con el abuso sexual infantil, una cifra superior a los 17 millones del 2019.
“El abuso sexual infantil en Internet está aumentando. Existe evidencia de que el abuso se está volviendo cada vez más extremo”, apunta Johansson. "Durante la pandemia, donde más perpetradores se encontraban en casa aislados, la demanda de material de abuso sexual infantil ha aumentado, en algunos estados miembros de la UE hasta en un 25%”, advierte.
“Propondré una legislación en los próximos meses que requerirá que las empresas detecten, informen y eliminen el abuso sexual infantil”
Sin embargo, la comisaria advierte que se trata apenas de “una fracción del número real” y que por ello “propondré una legislación en los próximos meses que requerirá que las empresas detecten, informen y eliminen el abuso sexual infantil”, lo que implica que “un informe voluntario ya no será suficiente”, como sí lo es hasta la fecha.
La actual normativa europea permite a las redes sociales y servicios de correo y mensajería decidir si quieren o no perseguir los delitos, pero Johansson busca forzar a las tecnológicas a que lo hagan para combatir estos actos dentro de las propias plataformas y limitar el acceso de los pederastas a sus servicios.
La obligación afectará a las grandes empresas de Internet que hasta la fecha han hecho el 99% de las denuncias. En concreto, advierte que “solo Meta (antes Facebook) es responsable del 95%”.
Por ello, la comisaria de Asuntos de Interior ha apuntado que la lucha contra el abuso de menores debe estar mejor coordinada y que se necesita un centro europeo especializado para mejorar la prevención, la aplicación de la ley y el apoyo a las víctimas.
En este sentido, Johansson asegura que la protección de datos y el cifrado son importantes, pero “el enfoque debe estar ante todo en la protección de los niños. Se trata de proteger su derecho a la integridad física, la seguridad en internet y la privacidad”.
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