Las noticias falsas son un dolor de cabeza al que Google está decidido colocarle fin y para ello está haciendo cambios en su motor de búsqueda con el objetivo de brindar contenido de alta calidad.
El gigante de Mountain View reconoció que al menos 0,25 por ciento de los resultados que arrojan sus búsquedas es contenido dudoso y ofensivo, un error que están dispuestos a enmendar, generando cambios en la clasificación de los resultados que arroja y además incorporando herramientas que produzcan informes para los consumidores de este contenido.
Tan solo en el mes pasado Google realizó una actualización de sus directrices de calidad de búsquedas; empleando probadores que detecten noticias falsas, contenido ofensivo y teorías de conspiración falsas que puedan atentar contra la estabilidad de una nación o un grupo.
Nuevos algoritmos fueron incorporados para reclasificar las búsquedas, basados en los resultados arrojados por los evaluadores del buscador, para evitar de esta manera que sean cargadas las noticias falsas o en todo caso que sean colocadas a lo último de los resultados.
Un ejemplo de lo que puede generar el contenido ofensivo y las noticias falsas fue el posicionamiento de búsquedas en las que se negaba la existencia del holocausto al realizar una exploración con la clave ¿realmente ocurrió el Holocausto?.
La empresa también pudo observar que algunos de los inconvenientes son causados por su propia herramienta de autocompletado, incorporando elementos en el motor de búsqueda que pueden ser señales xenófobas y racistas, incluso que promuevan el maltrato femenino, un fallo que ya hizo que Google perdiera juicios en Japón y Alemania.
Para subsanar de alguna manera estos inconvenientes, el buscador de Google ahora deja que los propios usuarios puedan clasificar resultados que puedan considerar ofensivos o falsos, bien sea en el autocompletado o en un resultado destacado.
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