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martes 19 de marzo de 2019, 12:00h

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Un estudio realizado por un grupo de españoles muestra cómo gran parte del software de los dispositivos Android que viene de fábrica vigila al usuario sin que este lo sepa.

Un estudio dirigido por dos académicos españoles, Juan Tapiador (Universidad Carlos III de Madrid) y Narseo Vallina (IMDEA Networks Institute), revela la otra cara de las aplicaciones preinstaladas en los móviles Android.

La investigación ha sumado más de 82.000 aplicaciones que vienen de serie en más de 1.700 dispositivos fabricados por 214 marcas. Estas apps se ejecutan con permisos privilegiados lo que les permite acceder a los datos de los usuarios sin requerir su consentimiento.

Más de 82.000 apps apps se ejecutan con permisos privilegiados lo que les permite acceder a los datos de los usuarios sin su consentimiento.

Además, no se trata solo del fabricante del móvil, también hay acuerdos comerciales con otras empresas con intereses comerciales o de obtención de datos. Entre estos se encuentran multitud de compañías que van desde fabricantes hasta operadores, redes sociales, empresas multimedia, de videojuegos o de antivirus.

Aplicaciones preinstaladas

Las apps preinstaladas se ejecutan con permisos privilegiados de sistema y sin posibilidad, en la mayoría de los casos, de ser desinstaladas de forma sencilla por el usuario medio. En ocasiones, puede que el usuario haya dado el consentimiento para el acceso a un servicio, pero en otros desconoce qué pasa con su información personal.

El informe identifica más de 1.200 compañías en las apps preinstaladas y más de 11.000 librerías (componentes de esas aplicaciones) en las que una gran parte de ellas está ligada con la publicidad y monitorización online con fines comerciales.

El estudio revela más de 4.845 permisos propietarios o personalizados de los vendedores expuestos por aplicaciones preinstaladas. Este tipo de permiso da acceso a las apps de Google Play a que eludan el modelo de permisos de Android para acceder a datos del usuario a la hora de instalar una nueva aplicación.

Las apps preinstaladas se ejecutan con permisos privilegiados de sistema y sin posibilidad, en la mayoría de los casos, de ser desinstaladas de forma sencilla por el usuario medio.

Por otra parte, un análisis exhaustivo del comportamiento del 50% de las aplicaciones identificadas indica que una fracción importante de las mismas presenta comportamientos potencialmente maliciosos o no deseados, como muestras de malware, troyanos genéricos o software preinstalado que facilita el aumento de prácticas fraudulentas.

Por último, la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) ha afirmado que contribuirá a la divulgación de las conclusiones de este estudio. A su vez, espera que sirva para el establecimiento de garantías para la aplicación efectiva del derecho a la protección de los datos de los usuarios.

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