Más de 60.000 españoles han perdido los datos de sus tarjetas de crédito

NordVPN ha realizado una investigación en la red oscura en la que han encontrado los datos vinculados a más de 6 millones de tarjetas de crédito y débito a nivel mundial. Según los expertos, este descubrimiento no es más que "la punta del iceberg", debido a que hasta el 63% de las tarjetas venían acompañadas de otra información privada vinculada a los dueños de dichas tarjetas o a las cuentas bancarias.

Con más de 60.000 tarjetas, España se sitúa en la undécima posición a nivel mundial de los países más afectados por este tipo de sustracciones.

Protección insuficiente

Tanto los bancos como las instituciones financieras hacen esfuerzos increíbles para tratar de proteger lo máximo posible los datos de sus clientes de los fraudes con tarjetas de crédito o débito, sin embargo, los delincuentes también trabajan sin cesar para encontrar nuevas fórmulas con las que acceder a las carteras de sus víctimas.

Según un nuevo estudio de NordVPN en el que se han analizado los datos vinculados de hasta 6 millones de tarjetas de pago robadas y encontradas en la web oscura, dos de cada tres tarjetas están vinculadas a algún tipo de información privada de sus víctimas, como puede ser el caso de una dirección, un número de teléfono, una dirección de correo electrónico e incluso el número de la Seguridad Social.

De entre las 6 millones de tarjetas encontradas, en total, 60.173 son procedentes de España, lo que convierte a nuestro país en el undécimo más afectado a nivel mundial y el cuarto si nos centramos en Europa, región bastante afectada por este tipo de delito.

Los propios investigadores han calculado que el precio medio de cada tarjeta española sustraída es de 6,12?, algo bajo con respecto a la media mundial de 6,37? debido a que son bastante propensas al fraude. Si tenemos en cuenta el índice de riesgo de fraude de tarjetas de NordVPN que mide el riesgo de 0 a 1, el índice en España es de 0,47.

Los riesgos del robo

Una vez sustraída la información y creada la base de datos, los delincuentes tienen la oportunidad de vender dicha información al completo por unos 17 millones de euros en total. Sin embargo, haciendo uso de las tarjetas y los datos vinculadas a las mismas, los ciberdelincuentes tienen, a su vez, la oportunidad de obtener mucho más beneficio en comparación con el precio original del producto.

Todos estos datos proceden de muchas partes del mundo y a pesar de que España se encuentra en un puesto alto de la tabla en lo que a sustracciones se refiere, nadie compite con Estados Unidos que acumula más de la mitad de registros de tarjetas de crédito robadas del total de 6 millones que se ha encontrado.

Su elevado índice de popularidad de las tarjetas, su gran población y su fuerte economía hacen que sea uno de los destinos preferidos de los ciberdelincuentes para sustraer este tipo de información, a pesar de que las tarjetas más valoradas, con un precio de 10,5? por tarjeta, siguen siendo las procedentes de Dinamarca.