Hasta ahora Nokia había apostado mayoritariamente en sus últimos teléfonos multimedia de gama alta por el diseño deslizante o ‘slide’, pero fiel a su filosofía de ofrecer móviles para todos, la finlandesa ha presentado un teléfono destinado al entretenimiento de tipo barra para aquellos a los que no les gusta mover un sólo dedo al acceder al teclado alfanumérico. En el apartado tecnológico, es un clon de los Nokia N95 y N95 8GB; a saber: HSDPA, cámara de 5 megapíxeles (con lente Carl Zeiss), GPS integrado, radio FM, Wifi y Bluetooth. De todas formas, y a pesar de su paralelismo con sus hermanos mayores, hay dos detalles que nos han parecido acertados y que mejoran un par de puntos flojos del casi perfecto modelo N95 8GB; por una parte la lente de la cámara de fotos integrada viene protegida por una cortinilla de plástico, elemento que es todo un acierto, sobre todo por los remordimientos que produce someter a una lente de nada menos que 5 megapíxeles al caos de muchos bolsillos, en los que el teléfono tiene que lidiar con llaves, monedas, encendedores o bolígrafos, produciéndose arañazos en la lente que repercuten después en la calidad de las fotografías. Con este protector, queda completamente aislada de los daños que puedan causar esta clase de objetos, además de mantenerla al margen del polvo y las salpicaduras. El otro aspecto que también ha sido perfeccionado es el de la conexión vía cable, que ahora viene otorgada por un conector más pequeño, de tipo microUSB. De todas formas, y por rizar el rizo en un terminal tan logrado como el que nos ocupa, sigue cojeando la conectividad USB –y no sólo en el N82, sino en muchos modelos de la finlandesa-, al no permitir la carga del terminal cuando se conecta el teléfono al portátil o al ordenador de sobremesa. Es algo habitual en los terminales de gama alta de Nokia; una barrera que otros fabricantes ya han superado y que es todo un engorro al utilizar el teléfono como módem, operación que acarrea un consumo de batería muy alto, obligando al usuario a sumar un cable más (el del cargador) a la hora de trabajar en itinerancia.
Vídeo en alta calidad
El vídeo es un punto que se ha cuidado al máximo. No en vano se comercializa con un cable que permite conectar el equipo a la TV para disfrutar de las películas que se hayan realizado –los resultados son sencillamente espectaculares-, y de los 30 frames por segundo a los que graba el N82; los cuales dan mucho de sí a la hora de realizar el visionado sobre la pantalla televisiva. Destaca también la calidad del micrófono que capta el sonido. Se puede afirmar que no tiene casi nada que envidiar a muchas cámaras compactas de fotos y vídeo, con funciones multimedia avanzadas y con una tarjeta microSD de 2GB en el paquete de compra que permite realizar centenares de fotografías y grabar hasta una hora de vídeo con la máxima calidad.
Todo un señor flash
A la hora de realizar fotografías, vayan nuestras felicitaciones para el flash de xenón que incorpora el equipo. En muchos teléfonos de otros fabricantes, realizar fotografías con poca luz resulta un engorro y, aunque una vez captadas, en la pantalla del terminal se vean de forma correcta, la cosa cambia al trasladarlas a una pantalla de mayor calidad y dimensiones, como lo suele ser la del PC. Pues bien, el flash de xenón del N82 es uno de los mejores que ha pasado por nuestras manos, algo de lo que dan fe las fotografías que ilustran estas líneas, realizadas en habitaciones completamente a oscuras, con la única iluminación que proporcionaba el flash. El resultado habla por sí solo.