Según un nuevo estudio de Juniper Research, los proveedores satelitales generarán más de 370 millones de dólares en ingresos D2C en 2026, frente a los 100 millones estimados para este año. El incremento, superior al 260% interanual, refleja el aumento de acuerdos entre operadores móviles y compañías satelitales para ofrecer servicios híbridos que extienden la cobertura allí donde las redes terrestres no alcanzan.
El analista sostiene que el crecimiento responde principalmente a la consolidación de acuerdos entre operadores móviles tradicionales y proveedores de satélites en órbita baja (LEO). En los últimos meses, compañías como SpaceX, a través de la constelación Starlink, han ampliado su lista de socios globales con MNO como KDDI en Japón o T-Mobile US en Estados Unidos.
Estos acuerdos permiten que los usuarios accedan a conectividad vía satélite desde un smartphone convencional, sin antenas externas ni terminales dedicados, lo que facilita la adopción del servicio en mercados con geografía compleja o cobertura irregular.
Asimismo, el informe subraya que esta cooperación continuará siendo un elemento fundamental para la expansión de los servicios D2C. La consultora anticipa que los operadores satelitales utilizarán la infraestructura móvil terrestre como vía de entrada al mercado de consumo, en lugar de competir con ella, especialmente debido a las limitaciones técnicas del satélite en interiores.
El debate sobre Starlink: ¿operador móvil o socio estratégico?
En 2025, Starlink adquirió más de 17.000 millones de dólares en espectro estadounidense e internacional. Esta operación alimentó especulaciones sobre una posible transformación de la compañía en un operador móvil global capaz de competir directamente con las telecos tradicionales. Sin embargo, Juniper Research descarta que este escenario pueda materializarse a corto plazo.
“Un operador móvil con enfoque satelital tendrá dificultades para ofrecer un servicio comparable al de los operadores terrestres"
Según Alex Webb, analista sénior de la consultora, “un operador móvil con enfoque satelital tendrá dificultades para ofrecer un servicio comparable al de los operadores terrestres, especialmente en interiores, donde la señal satelital se ve fácilmente obstruida”. En este sentido, Webb afirma que los satélites no pueden garantizar una continuidad de servicio equivalente a la de las redes terrestres, lo que reduciría el valor del servicio para los consumidores.
De este modo, la consultora defiende que el futuro inmediato de las operadoras satelitales pasa por consolidar alianzas con los MNO existentes y no por intentar sustituirlos. Juniper Research considera que esta estrategia es la vía más adecuada para recuperar la inversión realizada en constelaciones LEO, cuyo despliegue exige un enorme esfuerzo financiero.
Más allá del caso concreto de Starlink, el informe enfatiza que la tecnología D2C debe interpretarse como un complemento de las redes móviles terrestres. El satélite ofrece cobertura en zonas rurales, marítimas o montañosas donde los MNO no pueden desplegar infraestructura de forma eficiente, pero no está diseñado para cubrir de forma total el consumo urbano o el uso intensivo en interiores.
Este enfoque híbrido coincide con las estrategias que algunos operadores europeos están explorando para reforzar la resiliencia de sus redes, especialmente tras episodios recientes de apagones eléctricos y fallos masivos de conectividad. La conectividad D2C aporta, además, un valor estratégico para servicios de emergencia, protección civil y continuidad operativa en zonas donde la cobertura terrestre puede verse comprometida.