Después de tantos años de andadura y de trabajar con la división de teléfonos inalámbricos (DECT) de Siemens, nos declaramos francamente molestos; molestos porque han sacado un teléfono de su gama Gigaset, el SL 400, objeto de esta revisión, que con tamaño y aspecto de móvil, encima de la mesa y, entre tanto ‘cacharrito’ que hay por el laboratorio, no lo reconocemos. Especialmente cuando está boca abajo.
Y es que dice el fabricante que “no se puede tener más teléfono en menos espacio” y, tal vez, no le falta razón.
Desde luego, es el más compacto de su gama y con diseño barra de formas redondeadas, los diseñadores de Siemens no sólo juegan con los materiales –metal y pasta- o con los colores –negro y cromado-, sino con un display de 1.8” en color que soporta fotoID (identificación del llamante por medio de una fotografía, avatar o imagen), fondos de pantalla, temas (con diferentes colores de letras), la cual se lee y se ve con claridad; no sólo el menú (con seis iconos en cuadrícula), sino también los submenús, por los cuales nos podemos mover con el botón navegador central.
El segundo cuerpo del dispositivo es un teclado completo dividido en tres áreas: las llamadas ‘hot key’ o pulsadores que en cada momento responden a la función que se 
indica en pantalla; los cinco botones destacados (altavoz, mensajes, colgar, llamar/registro y el central con funciones asignadas en cada una de sus posturas); así como un teclado alfanumérico de catorce botones entre los que están los propios de los sistemas DECT de retención de llamada para realizar la transferencia a otro terminal, o el mute (desactiva el micrófono).
En la trasera, un altavoz que nos permite usar el teléfono en modo manos libres.
Peculiaridades
Entre las peculiaridades que aporta este nuevo SL 400, están la incorporación de tecnología Bluetooth para conectar auriculares inalámbricos y el cargador miniUSB, por si, llegado el caso, queremos cargar el teléfono sin ponerlo sobre la base.
Por supuesto, la estación de reposo y la de sistema no tienen por qué estar en el mismo sitio, lo cual nos confiere libertad en cuanto a colocación y movimiento.
Además, lleva calendario, función ‘expert’ para personalizar el menú y tener a mano aquellas funciones que más utilizamos, quince melodías de sonido que se pueden asignar a entradas concretas de la agenda (por ejemplo el mismo tono para todos los miembros de la familia), registro de las 20 últimas llamadas, etc.
Resulta curioso que, a pesar de ser un teléfono en color, el menú sea monócromo y los iconos muy simples.
Si (
No(
