El gigante estadounidense ha acordado pagar una sanción de 170 millones de dólares con la cual liquida los cargos que acusaban a la compañía de recopilar datos de menores de edad a través de YouTube, su plataforma de vídeos.
Además, el acuerdo, alcanzando con la Comisión Federal de Comercio y el Fiscal General de Nueva York, requiere que YouTube lleve a cabo una serie de cambios para garantizar que los canales dirigidos a niños menores de 13 años no recopilen datos con el fin de mostrar anuncios dirigidos.
Google ha acordado así resolver los cargos con esta sanción, así como la adaptación de sus prácticas comerciales
Los reguladores alegaron que Google sabía que algunos canales de YouTube eran populares entre los más jóvenes, promocionaron esto a las marcas y rastrearon los historiales de visualización de los niños para mostrar anuncios, gracias a los cual recaudaron “millones de dólares” como resultado de la reiterada violación de leyes federales de privacidad para niños.
Google ha acordado así resolver los cargos con esta sanción, así como la adaptación de sus prácticas comerciales, deteniendo la recopilación de datos en vídeos de YouTube que se crean claramente pensando en los niños y requiriendo que los creadores de vídeos etiqueten el contenido destinado al público joven.
Google no admite culpa, pero hará cambios
El acuerdo acepta muchas de las reclamaciones planteadas por más de 20 grupos de consumidores y de privacidad en una queja de abril del año pasado y responde también a las quejas que llevan años lanzándose contra YouTube por este hecho.
"Continuaremos trabajando con legisladores de todo el mundo en esta área"
El acuerdo, sin embargo, no requiere que Google admita culpa por sus acciones y algunas voces importantes como la comisionada de la FTC Rebecca Kelly Slaughter han expresado su temor a que este acuerdo requiera muy poco de YouTube para encontrar y obligar a los creadores de contenidos que intencionalmente etiquetan mal sus vídeos, algo que ha descrito como “una valla, pero sólo con tres lados”.
Por su parte, la directora ejecutiva de YouTube, Susan Wojcicki, ha señalado que el acuerdo “protegería mejor a los niños y a las familias en YouTube” y ha asegurado que “continuaremos trabajando con legisladores de todo el mundo en esta área”.
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